Lazo Roto |Malec| Omegaverse

capítulo 13

-¿Me dirás que fue lo que paso? -Alec no quería sonar tan insistente, pero estaba preocupado, había sido un gran logro hacer a Magnus volver al hospital e ir a la zona de comida de aquel lugar para poder hablar un poco al respecto de lo que había ocurrido hace unos momentos, necesitaba saber que había ocurrido, saber la razón de aquel llanto. Magnus apretó el vaso de té que Alec le había llevado, según el alfa para que pudiera tranquilizarse un poco y relajarse con el té, pero Magnus no estaba tan seguro de querer beber algo después de lo sucedido.

Aún la imagen que había presenciado estaba en su cabeza, se había alejado de su antigua univeridad para dejar de verlos, pero parecía ser que el destino le estaba jugando sucio y jamás creyó que presenciaría una escena con ellos de nuevo, juntos... y esperando, se preguntaba si acaso estaban en el área de maternidad, allí es en dónde Magnus iba a ir, seguramente el medico le reprendería por no asistir a tiempo a su cita, pero ya no le importaba del todo, podía agendar una nueva y disculparse, poner una excusa del por qué había faltado y listo, no habría más problemas.

-Él estaba aquí...

-¿Quién? -preguntó Alec.

-Mi... -Magnus miró a los ojos a Alec-, el alfa que me dejo...

La necesidad de decir su alfa, se fue de inmediato, ya no lo era, pero su mente quería jugarle una mala pasada, y ahora lo había logrado, decir inclusive que ya no es su pareja le dolía hasta el alma, era insoportable sentirse de ese modo.

Alec apretó levemente su mandíbula, debía admitir que no esperaba aquello.

-¿Era a quién mirabas? -Magnus dio un corto asentimiento-. ¿Era él que estaba con esa omega? -Magnus bajo la mirada hacía su bebida caliente y después dio un asentimiento.

Ahora Alec sabía a quienes miraba tanto el omega, soltó un suspiro, sabía que eso era muy duro, demasiado para cualquiera, mirar a quien antes te juraba un amor eterno con alguien más duele, y seguramente el omega se sentía mal, seguramente se pregunta lo que hizo mal, pensando en las razones por las cuales ese alfa lo había dejado, simplemente Alec no lo comprendía, ¿Quién sería capaz de dejar a ese omega? A pesar que apenas y habían tenido algunas conversaciones, el alfa se había percatado de que Magnus era un omega bueno y dulce, sus pocas sonrisas eran preciosas, y esos hermosos ojos te llegaban a cautivar de por medio.

Él se hubiera arrepentido si lo dejará, además no sería capaz de hacerle daño a ese omega, de solo verlo lo único que quería hacer era llevarlo hacía sus brazos para brindarle un cálido abrazo y mantenerlo con él en aquella posición siempre, para protegerlo de todo lo malo que llegara a haber alrededor.

-Es un idiota -Magnus se sorprendió por aquel comentario, miró al alfa quien mantenía levemente su ceño fruncido, como analizando algo-, no lo entiendo, si fuera él, no cambiaría a tan lindo omega con esa tipa -Magnus quería reír, las expresiones de alfa cambiaban constantemente, y eran divertidas, escucharlo era divertido-, debería ir con él, tomarlo de los hombros y darle bofetadas por lo idiota que es al dejar a un hermoso omega.

Magnus no pudo evitar reír al ver como prácticamente Alec había estirado sus brazos hacía a un lado para tomar un objeto invisible, (lo cual imagino sería su ex pareja), mientras sacudía y después abofeteaba en el aire.

-¡Vaya! Te hice reír -mencionó Alec mientras que Magnus dejaba que la risa se esfumara suavemente-, no pares, es muy linda.

-No, no lo es -mencionó Magnus sonriendo levemente-, debe ser escandalosa.

-¿Escandalosa? ¡Por supuesto que no! Tu risa es melodiosa, ¡Me gusta tu risa! Desearía que la mía sea así.

-Gracias -Magnus se permitió sentirse feliz por un momento, ese alfa le había hecho sentir que por breves momentos la tristeza y la imagen antes vista se fueran por completo, y eso podía ser considerado magia, y era hermoso.

-Magnus... -el omega miró de nuevo a Alec-, ¿estás enfermo o algo por el estilo? Sé que no debería de meterme, pero... Me preocupa que te haya pasado algo.

-No es nada -respondió-, vine para ver a mi cachorro -ahora Alec lo comprendía, y la emoción lo invadió, por alguna razón quería verlo, en verdad quería hacerlo, quería saber como era un pequeño feto, sin importarle que lo haya visto en fotos.

-¿Puedo acompañarte?

El omega sintió sus mejillas arder ante esa pregunta, abrió los ojos en grande, el alfa sabía que no debía de ser tan brusco, pero ya tenía la costumbre de hablar lo que pensaba al instante, lo que le metía a veces en problemas, pero en verdad quería acompañar Magnus.

-N-no creo que...

-¡Por favor! -pidió de inmediato el alfa, tomando ambas manos del omega, causando que una corriente pasase en ambos con aquel contacto, Magnus se sorprendió al sentir aquello, fue una sensación tan nueva e increíble-. Prometo no ser un estorbo, pensarás que no estoy ahí.

-No estoy seguro, usualmente solo entran los padres del bebé...

-Entonces considerame su padre solo esta vez, y no volveré a molestar al respecto, ¿sí?

Magnus estaba verdaderamente sorprendido, nunca pensó que un alfa sería capaz de eso, y mucho menos sabiendo que no es nada del cachorro en su vientre, era un acto muy dulce de su parte, al menos el poco miedo que había en Magnus se disiparía con la presencia de Alec.