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Esta obra pertenece a YoonxG en Wattpad, únicamente en español. Cualquier copia, adaptación y/o traducción es completamente denegada.

[Pueden releer el capítulo 11 para comprender mejor este capítulo. ❤️]

Mi mamá solía decirme todos los días
que fuera cuidadosa con los chicos.
Porque el amor es como jugar con fuego,
saldré herida.
~Playing with fire

Tic... Tac... Tic... Tac...

Era lo único que Hongjoong podía escuchar encerrado en ese sitio. Hacia un par de semanas del accidente con Yunho y el pequeño pelirrojo lo había querido visitar más de una vez, pero Mingi apenas lo dejaba salir a la universidad.

Entendía que estaba preocupado, y el también lo estaba, tenía miedo, pero... A Yeosang lo habían asesinado en casa de su novio... A Jongho, lo habían sacado de su casa en plena madrugada, ¿Que le aseguraba a el estar a salvo ahí? Al menos quería salir, como antes podía.

El sonido de aún auto aparcando frente a la casa le hizo volver en si, rápidamente se puso de pie, corriendo hasta la puerta principal. La llegada de su novio era, por mucho, lo más emocionante que le pasaba estando encerrado ahí.

—¡Minki!- El menor corrió hacía los brazos de su novio, quien lo recibió con una gran sonrisa y un fuerte abrazo.

—¿Cómo está mi lindo novio?- Preguntó el mayor dejando su saco en el pechero y caminando de la mano del mencionado. —Espero que hayas regresado en cuanto tu horario de la universidad terminó.

Hongjoong hizo una mueca un tanto inconforme con esa nueva regla que ahora formaba parte de su día a día, pero por obvias razones, no manifestó su inconformidad, pues la última vez logró enfadar a Mingi y este le había abofeteado.

—Claro que si, vine en seguida.- Murmuró con una débil sonrisa, el mayor asintió conforme acomodándose en el sofá y colocando al pequeño sobre su regazo.

—¿Tienes hambre?- Preguntó el castaño mientras sus manos viajaban hasta la cintura del menor.

Este negó abultando su labio inferior, por su mente no pasaba nada en particular...

Pobre pequeño, si tan solo estuviera listo para esto...

—Pues yo sí, y tengo justo frente a mi lo que voy a comer.- Mingi comenzó a explorar más allá de la ropa del menor, quien se sintió un poco abrumado, pues desde hace unos pocos días su novio no paraba con el tema, y aunque al principio le pareció lo más genial del mundo, últimamente el mayor estaba siendo muy salvaje con el.

—M-Mingi... Espera, aún estoy adolorido por lo de ayer.

La noche anterior, Hongjoong había sido sometido por el. Había atado sus manos y lo había tenido a su merced durante un buen rato. El pelirrojo solo necesitaba un descanso.

—No seas aguafiestas, será algo rápido, no te habías negado antes.- Song había abierto ya su camisa, sin dejar de tocar al menor.

Pero lo siguiente que dijo, fue la gota que derramó el vaso.

—Y tú no habías sido tan salvaje antes.

Mingi se detuvo en ese momento, acercándose al rostro del menor, quien tragó saliva sin saber bien lo que le esperaba. Y aquella sonrisa, llena de ternura y cinismo, fue realmente aterradora.

—Oh, cariño, te voy a mostrar lo que es ser salvaje.

El menor ahogó un grito al ser levantado con rapidez sobre el hombro contrario, comenzó a reír sintiendose tan nervioso a la vez, por un segundo quiso creer que su novio estaba bromeando, pero al ser tirado con brusquedad a la cama, sus esperanzas comenzaron a disminuir.

Tardó unos pocos segundos en reaccionar a lo que realmente estaba pasando. Mingi, por otro lado, cerró la puerta con llave y tomó su propia corbata acercándose a Hongjoong.

—Mingi... Y-yo solo estaba jugando... P-por favor...- El pelirrojo intentó cubrir su rostro, pero lo siguiente le dejó anonadado, sus manos habían sido tomadas con fuerza y atadas al igual que ayer, se quejó despacio ya que el nudo estaba realmente apretado.

—Mingi, ¿Qué vas a... ¿¡Qué vas a hacer?!

El menor, ya bastante alterado, comenzó a forcejear por liberarse, pero un golpe en la mandibula le dejó petrificado.

—Así aprenderás a no retarme otra vez.- Dijo el mayor retirando sus pantalones rápidamente, y los contrarios de la misma forma.

Hongjoong comenzó a suplicar mientras sentía sus mejillas mojadas, esto era una maldita pesadilla. No fue hasta que sintió la primera estocada, que pudo sentir su mundo romperse, dolía como el infierno y cada movimiento solo era peor que el anterior. ¿Por qué Mingi estaba haciendo eso? ¿Por qué le hacía daño? El había prometido protejerlo de todo... Pero aquellas palabras habían sido completamente olvidadas.

En pocos segundos la habitación se vió envuelta en jadeos por una parte y sollozos por otra. El menor simplemente había dejado de moverse al no obtener resultados, muy por el contrario, sentía como sus paredes se desgarraban, sentía que en cualquier momento su cadera se rompería, solo le quedaba llorar y suplicar en silencio que se detuviera.

•••

Aquel ruido incesante taladraba los oídos de Hongjoong, no tuvo más remedio que abrir los ojos lentamente, pero al moverse solo un centímetro, el punzante dolor atacó desde su cintura hasta su espalda baja. Lanzó un quejido mientras a su mente venían todos los recuerdos de lo que había pasado, no había sido un sueño, no había sido una pesadilla... Todo aquello en verdad había pasado.

La melodía volvió a invadir la habitación y el pudo reconocerlo, era su móvil esperando a ser atendido, pero el no podía moverse, no lo haría. Volviendo a tumbarse en la cama, se percató de que afuera ya estaba oscuro, ¿Cuánto tiempo se había quedado inconsciente? Mingi ya no estaba en la habitación.

Lentamente trató de acomodarse mejor, seguía desnudo y en un intento por cubrir su cuerpo, pudo ver toda la sangre que había en las mantas. Una gran mancha yacia debajo de el, quien asustado trató de moverse... Grave error.

Otra punzada esta vez dentro de él le hizo comenzar a llorar, no pudo soportarlo más, el dolor era un infierno. Se sentía sucio, usado... Se sentía lastimado.

Los sollozos comenzaron a ser más y más fuertes, a medida que recordaba todo. Cubría sus oídos suplicando que se detuviera, sus gritos provocaban que el dolor en su cabeza aumentará, pero solo estaba tratando de aliviar el inmenso dolor que sentía.

Pequeño pelirrojo, esto solo es el comienzo.

🍰

Hey, aquí Yoon.

A mí también me duele lo que escribo, no crean que solo ustedes sufren. :P
Este capítulo sucede el mismo día de lo sucedido con Wooyoung (capitulo anterior), para que entiendan un poco más.
Por mi parte es todo, nos vemos en la siguiente actualización. ❤️

Yoon out.

||Treasure|| AteezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora