Sanguinario

Cap 2 Sin miedo

Lluvia, llueve ,llueve y vuelve a llover, andar por la carretera es un suplicio con un tiempo como el que hay ese dia, bueno llamarle carretera es simplemente un termino decorativo, pues la amalgama de barro, piedras desperdigadas y excrementos de los animales son lo que componen dicha carretera. Pero era mejor andar sobre esta carretera a arriesgarse a ir por el irregular terreno y partirse un tobillo.

A esas horas del dia la carretera estaba vacia, vacia a excepcion de una pobre alma que caminaba de forma vacilante, dando trapies cada pocos metros. Tras el a unos kilometros de distancia se levantaba una gran humareda negra. El hombre estaba herido de gravedaz, la pierna desgarrada, las costillas rotas y el brazo dislocado. Deliraba con la mirada perdida, no temia a enfermar por el frio ni porque se le infectaran las heridas, porque iba a preocuparse? acababa de ver cono toda su familia toda su aldea y su vida ardia en un frio fondo matutino invernal.

-Th Thargo hermano........Haroz,  Asirel madre........donde estais?

Balbuceaba mientras caminaba, su mente no podia asimilar lo sucedido, quien podria?

Recordo como la aldea comenzaba a arder cuando el trabajaba en el campo, recordo como corrio hacia la aldea para solo ver a sus familiares y amigos muertos y desmenbrados por criaturas corruptas y deformes.

No pudo pelear, antes de darse cuento lo golpearon y cortaron hasta dejarlo incosciente y darle por muerto.

Solo camina, hacia delante sin ninguna idea clara y con la mirada perdida. Quizas por la perdida de sangre o bien por el shock o por las dos cosas el pobre desgraciado cae desmayado en el lodazal.

Cuando abre los ojos solo ve una llanura verde ,salvaje y limpia y despues ve como esa llanura se torna roja, roja por la sangre de inocentes, inocentes asesinados por criaturas deformes criaturas corruptas enemigas de toda luz, rezumando odio y tambien ve a criaturas que no aparentan maldad alguna pero en su interior solo albergan oscuridad. Ve las caras de todos aquellos asesinados por el mal de forma injusta, ve la cara de su madre ,la de su padre y la de su querido hermano mayor.

En su interior algo se rompe y la colera lo embarga. Grita

-Dioses!!!reniego de vosotros! hipocritas que dejais sufrir a aquellos que os sirven y aman, ! juro por mi alma que no dare tregua a ningun ser nacido del mal, que mis llantos se transformen en tormentas! mis palabras en espadas, mis lagrimas en lluvia acida y que mi furia solo facilite que mis enemigos se ahogen en su sangre!!!

Lagrimas carmesis brotan de sus ojos y una sombra se cobija en su quebrado corazon. Un nuevo enemigo se levanta contra el mal, y este deberia temer, pues en la venganza el mas debil siempre es el mas peligroso.

Cuando abre los ojos de nuevo se da cuenta de que a sido una pesadilla pero no una cualquiera,esta le a desmatrado el camino que a de seguir. Mira a su alrededor y examina las paredes, la casa amplia y acogedora es digna de una familia pudiente y seguramente de una familia noble. La puerta se abrio y con ella pudo ver el aspecto de su acaudalado anfitrion. Anciano, muy anciano con el cabello largo y blanco, flaco pero saludable y un tanto alto y encorbado son las cualidades que saltan a la vista en el acto. Pero el herido se fija en algo mas, sus ojos están tapados por una tela marron y en su brazo un tatuaje de un yelmo de aspecto bestial devorando a una criatura parecida a un pequeño demonio.

-Quien sois anciano? pregunta el herido con un tono de desconfianza

-La educacion dicta que lo correcto en el inicio de una conversacion es presentarse, mi nombre es Geomedes El Anciano, cual es tu nombre?

-Mi nombre es Arnor, no se que buscas anciano pero yo no tengo nada, lo e perdido todo no hay probecho en mi.

-Todo lo que quiero de ti lo tengo todo aqui mismo. Le dijo mientras lo revisaba con la mirada de arriba a abajo.-Te ofrezco un trato, que te pareceria si te doy la oportunidad de vengarte de aquellos que te destrozaron la vida?, solo te pido a cambio un favor.

El hombre de nombre Arnor no se fiaba, porque iba a ayudarle un total desconocido, puede que estuviera loco pero recapacito con una agria sonrisa en la boca y un terrible recuerdo en su cabeza.

No le quedaba nada, nada por lo que seguir respirando. Asique por suerte o por desgracia no perdia nada.

-Acepto, no queda nada de mi, que es ese favor del que hablas?

Al anciano le cambio la cara de seriedad por una de tristeza.

-Mi vida, comenzo diciendo el anciano- A sido una larga lista de desgracias, aun con mi gran fortuna apenas e podido proteger a mis seres queridos. Por eso te pido que partas hacia la ciudad de Par Volen La Ciudad De Las Cataratas. Te pido que protejas a mi nieta pues es mi unica heredera y tengo la sensacion de que su don ayudara al hombre en tiempos dificiles.

-De que don me hablas?pregunto extrañado

-Mi nieta es capaz de curar cualquier herida. Pero te adelanto que no es capaz de revivir a los muertos.

La cara de Arnor cambio por una de consternacion.

-Deacuerdo cuando parto? al anochecer?

El anciano rio y le pregunto - No creeras que voy a confiarte la proteccion de mi nieta en tu estado actual verdad?

-Y cual es mi estado actual anciano? pregunto con los ojos entrecerrados.

-Tu estado actual? ,pregunto en tono jocoso -Tu estado actual es nefasto ,

no podrias defender a mi nieta ni de un uron. No tienes carne en los huesos. No tienes destreza en las armas , no sabes portar una armadura, no sabes leer, ni canalizar magia

-Habeis dicho canalizar magi....

-No hay tiempo para hablar, mis hombres te entrenaran, mis sabios te ilustraran y mis sirvientes te alimentaran. Te convertire en un arma.

-Antes de nada, interrumpio Arnor,- Como siquiera conoces mi aspecto con una venda en los ojos?. Es imposible.

-Definir como imposible algo que simplemente no es corriente es de mente simple y necia. Crees que por mi venda no puedo ver mas alla? no me hace falta verte para saber lo que eres y lo que haras.

Mientra decia esto ultimo se dio la vuelta y salia de la amplia habitacion, antes de cruzar el umbral se dio la vuelta y le hizo un gesto a Arnor para que lo siguiera.

Mientras el anciano hablaba Arnor miraba la arquitectura del gran edificio, largos pasillos con elaborados cuadros, todos ellos describiendo y contando grandes gestas posiblenente de la msma familia y antepasados del anciano.  De todos ellos el que le llamo la atencion fue la imagen pintada de una familia joven. Todos juntos y unidos, sonriendo, se podia ver en la imagen a dos niñas de pelo rubio sonrientes abrazando a su madre con el mismo color de pelo. Mas a la derecha se veia a un hombre fuerte y robusto rodeando con el brazo los hombros de un apuesto joven. Posiblemente su hijo. El hombre en el brazo colocado alrededor de los hombros del joven dejaba parte del brazo al descubierto y en ella no hacia falts fijarse mucho para ver el tatuaje que llevaba, la imagen de un yelmo bestial con un demonio entre sus fauces. Al ver aquella idilica imagen Arnor tuvo que reunir todas sus fuerzas para no caer en el llanto.

Despues de hablar detenidamente cob el anciano se le dirigio asta su dormitorio, al quedarse solo en la habitacion se tumbo en la cama y lloro hasta quedarse dormido.