El despertador sonó a las 7:00 de la mañana, apague el maldito sonido y me dispuse a levantarme, fui al baño y me encontré a Sophie duchándose.
- Buenos días Sophie, no sé cómo te has podido levantar, estoy muy cansada- dije con un bostezo.
- Buenos días amiga, pues la verdad es que tengo ganas de ir al instituto, a ver a que gente conocemos- dijo Sophie riéndose.
- Pues yo espero que pasemos desapercibidas, no quiero tonterías, te lo advierto- dije tirándole la toalla- Date prisa, que me tengo que duchar- y salí de la puerta.
Al cabo de un rato ya estábamos duchadas y vestidas, Sophie eligió unos pantalones pitillo y una camiseta con un bonito escote, se puso unas botas cortas y una chupa color negra. Yo en cambio, como el clima aquí ahora mismo es de calor, normal en el mes de marzo, decidí ponerme unos pantalones cortos, unos botines anchos y una camiseta ancha, pero que encajaba bien con mi cuerpo. Cogí una chaqueta y las dos bajamos.
- Buenos días chicas, que madrugadoras por favor- dijo Loreen con una sonrisa.
- Hazme caso que yo me hubiera quedado en mi cama- dije con una sonrisa.
- Bueno chicas, vámonos, tomad dinero para el desayuno y el almuerzo y os veré por la noche, espero que no os importa, pero tranquila Caroline, dentro de poco tendrás tu coche, que mama me dijo que sabias conducir- dijo Loreen alegremente.
No quise pensar en mis padres de nuevo, se que Loreen hacia todo lo posible porque me sintiera bien, y se lo agradecía enormemente.
Loreen nos deja en la puerta del instituto y antes de irse nos deseo buena suerte.
Entramos por una gran puerta, ya podía sentir como unas miradas nos recorrían de arriba abajo, Sophie estaba encantada, pero yo ya estaba incomoda y no sabía como reaccionar.
Fuimos a la oficina tras un mar de miradas y hablamos con la secretaria para que nos diera el horario. Salimos de allí y nos dispusimos a entrar a matemáticas, me encantaba esa asignatura y seguramente iba a sobresalir.
Al entrar en la clase, todo el mundo se giro para vernos, pero sobre todo a mi, que ya sentía un gran nudo en el estomago, encontramos dos asientos libres y nos sentamos rápidamente.
- Hola guapas, sois nuevas, ¿no?- pregunto un chico alto con aspecto de prepotente- Mi nombre es Brian- dijo con una sonrisa.
- Hola Brian, yo soy Sophie y ella es Caroline, encantada- dijo Sophie sonriente.
Pero yo ya sentía que me miraba a mí y no sabía que decir. De repente entro el profesor y Brian se marcho a su sitio.
- Buenos días chicos/as, como veis tenemos dos nuevas alumnas, Caroline Blair y Sophie Fisher, espero que las tratéis bien- dijo el profesor con una sonrisa.
- Tranquilo profesor, yo me encargare de eso- dijo un chico con una sonrisa.
- Gracias John- dijo el profesor.
No pude evitar darme la vuelta y vi que no paraba de mirarme, era un chico alto, un poco fuerte, pero no mucho, la verdad es que es realmente guapo, tiene una mirada muy penetrante y en un momento me guiño el ojo. Yo lo ignore y me puse a atender al profesor.
En esa hora me sentía aburrida ya que no tenía ningún problema con las matemáticas y me sabía los problemas que hacía.
Por fin toco el timbre y Sophie y yo nos dispusimos a desayunar, la cafetería era muy grande y tenía un montón de cosas para elegir, desde luego era mejor que mi anterior instituto.
ESTÁS LEYENDO
Placer oculto-TERMINADA
RomanceCaroline, una chica de 16 años, sufre la inesperada muerte de sus padres, con solo una hermana que la puede cuidar deciden vender la casa e irse a vivir a otro lugar.Justo alli comienza una historia entre amor, dolor y sexo.