Solo quiero protegerte.

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Comence a arrastrarme lentamente entre la hiedra, logre avanzar unos metros, ya no podía sentir mis piernas, los brazos habían comenzado a pesarme, ¿que era todo ese horrible lugar?

No puedo respirar. Es el final.- Me dije.

Y las sombras oscuras me envolvieron en la noche.

Unas manos firmes y cálidas tocaron mi rostro.

-Joder, ¿no puedes dejar de meterte en problemas solo por una vez?-  Pude observar la sombra de Aaron aun en la oscuridad.

Aaron me estaba mirando demasiado irritado, incluso en la oscuridad podia notarlo, estaba puesto de cuclillas a mi lado. Llevaba puesta nueva ropa seca y tenía el cabello alborotado.

Me sentía mareada, observe mí alrededor. Estaba acostada en el muelle. Estaba a punto de amanecer.

Había pasado todo el día caminando por aquella pelea en la mañana, tocándonos y huyendo por la noche, y joder íbamos a terminar la pelea en la mañana.

Estoy demasiado cansada para todo esto. Intente reincorporarme, con un brazo en el suelo del muelle pregunte:

-¿Co-m-no  llegue a-a-que?-Balbuce.

-Bien déjame ver, después de que me dejaste fallidamente excitado y saliste corriendo hacia el bosque con mi ropa en mano. Cosa que 1) No fue muy inteligente huir desnuda. 2) No fue muy sabio correr en la noche. 3) Jamás debes dejar a un hombre con una erección o se molestara bastante. Me quede en el lago a pensar que carajos haría contigo, pensé en varias opciones- ¿quieres oírlas?- Dijo alzando una ceja.

Aaron estaba hablando en un tono tan sarcástico que solo quería golpearlo en la cara y volver a quedar inconsciente.

-Bueno-dijo sin esperar igual una respuesta. Pensé en dejarte en el bosque hasta el amanecer, pero luego me dije que era demasiado sencillo y quería que sufrieras un poco más. Luego pensé en desaparecerme por unos días, para que así recapacitaras tu estupidez, que francamente- Rio.- Me hizo más reír que molestarme. Hasta que recordé aquella casa vieja. Así que fui al otro lado del bosque a casa, me cambie. Espere a que tú sola te castigaras. Y fui por ti, como el buen novio que soy.- Me dedico una sonrisa de superioridad.

Un momento.

¿Aaron tiene casa?

-¿Cómo es eso de que "fui a casa"? Si dormimos en el muelle.- Pregunte confundida, mientras terminaba de incorporarme para asi, por fin poder sentarme sobre mis piernas.

La expresión de Aaron cambio drásticamente al escuchar esa pregunta, su mandíbula se tensó, y sus ojos se desviaron hacia el lago.

¿Porque carajos no había dicho que tenía casa? ¿Aaron siempre llevaba la misma ropa? ¿Se cambiaba? En realidad, yo siempre llevaba la misma ropa, los mismos Jeans viejos y una camiseta color rojo y unos zapatos al tono. Pero en todo el tiempo que llevaba aquí, no me había percatado de la vestimenta de Aaron. ¿Cómo eso era posible?

-Contéstame Aaron. - Lo mire, fijamente.

Tenía la boca hecha una fina línea y el entrecejo levemente fruncido. Estaba mirando al otro lado del lago.

-Si Ann, fui a casa.- dijo con hilo de voz.

¡Maldita sea! ¿Hasta cuándo iba decírmelo? ¿Porque me lo estaba ocultando? Más preguntas que hacer,  al parecer esto ya no era solo sobre mi vida en la "tierra", en mi vida consiente. Cada vez tenía más preguntas sobre aquel lugar, sobre Aaron y sobre mi vida aquí.

Tenía que encontrar respuestas sobre todo. 

 Me mordí el labio superior intentando liberar toda la tención.- ¿Hasta cuándo tenías planeado decírmelo?- Pregunte.

-¿Hoy? ¿Después de la pelea?- Su expresión había cambiado, estaba mirándome como un niño mira a su madre cuando este ha hecho una travesura y lo han descubierto. Esperando mi reacción preocupado. Tienes que entender algo Ann,-Dijo con precaución. Solo quiero protegerte.- Había vuelto a mirar el lago con temor.

Maldita sea, estoy harta de esas tres palabras.

Angelique Adam's conoce al Amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora