1, 2, 3 Tocó la Pared

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Ya eran las ocho de la noche. Alec se preparaba para recibir a Jem y los hermanos. El timbre sonó, sin pensarlo Magnus fue abrir. Tomó el pomo y lo giro, pero está no se abrió, insistió nuevamente, pero nada cedió. Alec a paso lento llegó a la sala extrañado de no escuchar las voces.

—¿Bebé, sucede algo?

La puerta no abre — dijo jalando la puerta hacia él—, está trabada.

El mayor se acercó e intento, la voz de Jeremiah se escuchó desde afuera.

Chicos, estén pendientes, Max los quieres solo a ustedes.

Una risa surco las paredes, helando las pieles de los presente.

Ya vamos a jugar, papis —dijo Max.

Primero queremos ver a Rapha —exigió Magnus.

No hagan trampa, él es el premio mayor —volvió a reír—, importante debemos apurarnos antes que llegue el hombre malo.

Alexander, tengo miedo —dijo Magnus acercándose al pecho de su esposo.

Alec lo tomó por la cintura y lo besó de manera lenta y con todo el cariño que sentía.

Mi amor, perdón por todo lo que te hice sufrir a ti y a mí bebe, nunca fue mi decisión —repitió el beso—, nunca olvides que te ame.

Garbancito, no lo digas si —lo besó con desespero—, no te despidas.

Papi, mami empecemos ya tengo hambre —apuró Max—, no se olviden tienen tres oportunidades cada uno. Cuentan los dos.

Magnus y Alec se voltearon en la pared. Antes de tapar los ojos el pelinegro no dudó en llamar la atención de su príncipe.

—Te amo bebé, no lo olvides — lanzó su beso.

—Y yo a ti, mi vida —contestó Magnus antes que la luz se apagará.

Al unisono y golpeando la pared dijeron:

01

02

03

Tocó la pared.

Al abrir los ojos Alec estaba en las habitaciones, mientras que Magnus se encontraba en la sala. Habían aparecido en lugares distintos sin ningún tipo de explicación. Risas retumbaban por los pasillo.

Papi Alec, eliges tú —dijo Max.

Salió de la habitación y buscó en el último cuarto, abrió el clóseth, pero estaba cerrado.

Perdiste papi —dijo Max—. Ahora es turno de mami Magnus.

1

—2

—3

—Tocó la pared.

Magnus fue a la cocina y abrió la puerta del lavandero, pero no consiguió más puerta.

—¡Augh mami perdiste! Ahora te toca papi Alec.

1

—2

—3

—Tocó la pared.

Fue a otra puerta y volvió abrir buscó por toda la habitación, pero nada.

1, 2, 3... Tocó La Pared 👻 || «Malec»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora