Hongjoong buscó su celular en su pantalón, cuando lo encontró comenzó a buscar una canción, esta empezó a sonar inundando toda la sala y lo puso sobre la mesita.
—Honggie quiere su perdón. —Habló con tono erótico y una voz suave haciendo una perfecta combinación. Comenzó a mover su cuerpo a movimientos lentos mientras se acercaba a Mingi.
Cuando estuvo aún más cerca movió su cadera con delicadeza de izquierda a derecha, paso sus manos por su cuerpo desde sus hombros hasta sus piernas, tentando al contrario. Le dió la espalda y se inclinó un poco para dejar a su disposición su trasero meneandolo, esperaba recibir por lo menos una caricia pero en ningún momento la mano de Mingi se acercó.
No sé rendiría tan fácil, volvió a darse la vuelta y está vez se sento en el regazo del mayor, pasando sus piernas a las orillas, poso sus manos en el cuello, acarició con suavidad aquel sedoso cabello morado mirándolo a los ojos, comenzó a mover su cadera de adelante hacia atrás creando un deliciosa fricción.
—¿Hong está perdonado?—Se acercó al cuello de Song mientras dejaba besos húmedos esperando por lo menos una palabra, algo que le dijera que estaba funcionando.
El Pelimorado estaba extasiado, tenía una gran erección bajo su pantalón y el hecho de ser frotada contra la de Hongjoong le calentaba todavía más. Sin responder a la pregunta buscó los carnosos labios hasta que ambos se besaron con desesperación, paso sus manos al trasero del menor masajeandolo sin pudor haciendo que los movimientos se incrementaran, sacando varios gemidos pero todos se perdían en la cavidad bucal del otro.
—Te necesito. —Habló Hongjoong cuando ambas bocas se separaron. Mingi puso de pie al contrario para que él hiciera lo mismo, las palabras no eran necesarias en ese momento, cada acción demostraba la falta que le había hecho. Hizo que se pusiera de rodillas en el sofá pero esta vez recargando su pecho sobre el mismo, paso sus grandes manos desde los muslos hasta llegar a donde sus glúteos comenzaban. La falda que tenía no cubría gran parte de este pero aún así la levantó para poder ver la hermosa braga que tenía.
"¡Maldición! Pensaste en todo."
Fue lo que el mayor pensó. Acercó su rostro hasta el borde de la bragas y comenzó a bajarlas con sus dientes, aún cuando no era muy fácil eso lo hacía más tentador. Hongjoong volteo levemente para poder verlo haciendo que mordiera su propio labio, lo estaba torturando.
Cuando la ropa interior quedó hasta sus muslos, Mingi se acercó para dejar un beso sobre ambas nalgas y mordiendolas con suavidad, con sus manos las separó dejando aquella rosada entrada a la vista. Acercó su rostro y paso su lengua remarcando el contorno de esta.
—Mnh~ —Kim enterró sus dedos en el sillón cerrando los ojos con fuerza mientras su respiración se hacía más pesada conforme la lengua de su profesor invadía su agujero.
Mingi comenzó a introducir aquel músculo húmedo con lentitud, incluso beso y mordió para darle más placer a su pequeño. Mientras penetraba aquella cavidad con su lengua también metió uno de sus dedos para lograr dilatarlo mejor.
—¡Más!—Exclamó el pelirrojo sumido en placer mientras comenzó a mover su cadera hacia atrás tratando de que entrara profundo, realmente lo necesitaba.
Cuando el mayor creyó que estaba lo suficientemente dilatado se alejó ganándose un reclamo, sonrió con algo de arrogancia pero tampoco podía soportarlo más. Retiro sus jeans al igual que su ropa interior, puso un poco de saliva sobre la punta de su pene y se puso detrás de él.
—¿Qué es lo que quieres que haga?—Aún cuando sabía lo que el menor deseaba, quería oírlo, quería que rogara porque lo follara.
—Metelo. —Su voz salió algo baja pero aún estando en ese momento su pena era algo perceptible.
—No te oigo. —Una bofetada en el glúteo derecho fue dada sacándole un jadeo a Hongjoong.
—¡Mételo! ¡Follame! ¡Te necesito dentro!—Rogó el menor en un acto desesperado por sentirse lleno.
Sin más demora su glande entro en él, se fue hundiendo hasta que todo su pene estuvo dentro, Mingi echó su cabeza hacia atrás, lo apretaba y la calidez le hacía sentirse tan jodidamente bien, se amoldaba perfectamente.
Se inclinó hasta poder estar cerca del rostro de Hongjoong y con una mano inclinó la cabeza para poder besarlo esta vez de una manera tierna, cuando se separaron poso sus manos sobre la cadera y comenzó a moverse despacio, pero noto que el Pelirrojo no quería ese ritmo ya que incluso comenzó a moverse tratando de que fuese con velocidad.
El vaiven fue aumentando de intensidad haciendo que varios gritos de placer salieran de la boca del menor por haber encontrado su próstata, estaba siento maltratada por la glande de su mayor pero le encantaba. Por la sala se escuchaban el choque de pieles, los muslos de Mingi chocando con las nalgas de Hongjoong, el sonido sucio de los fluidos que se formaba cada vez que entraba y salía de él.
El pelimorado se había mansturbado tantas veces recordando su primera vez con el menor pero el placer no se podía comparar con ese momento.
—¡SI!—El pene de Kim se frotaba contra su abdomen por los movimientos que se creaban al ser penetrado de manera casi bestial por el contrario, sentía que estaba apunto de llegar al clímax.
Solo bastaron algunos minutos más para que Hongjoong soltará su escencia, no había sido necesario tocarse, con el simple hecho de ser embestido había sido más que suficiente. Song soltó un gruñido por sentir como aquellas paredes anales le apretaban más su pene, dejó dos nalgadas más para finalmente eyacular dentro llegando al mejor orgasmo de su vida.
Dejo de moverse y se recargo sobre la espalda de su alumno sin salir de él tratando de que ambas reparaciones se regularán
—E-Entonces... ¿M-Me perdona?—Giró su rostro levemente para poder verlo.
—Crei haber sido claro. —Mostró una curvatura en sus labios de manera sincera.
—Me gustas. —Por segunda vez pudo ver aquella hermosa sonrisa que el mayor tenía, mostrando sus dientes y parte de sus encías. Todas sus ideas estaban claras, no estaba confundido. Estaba envuelto en el sentimiento que tenía hacia él y eso le hacía inmensamente feliz.
—Y tu a mi, Hong. —Cuando ambas respiraciones estaban nuevamente normales se enderezó dispuesto a salir de él pero Hongjoong se lo impidió comenzando a mover nuevamente su cadera en cámara lenta. Levantó la vista haciendo que sus miradas conectarán. —¿Otra ronda más?
—Si Daddy. —La exitacion choco en sus cuerpos de nuevo, esa noche al parecer no dormirían.
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Clases Privadas
Fanfic«Clases particulares... Bastante interesantes." >>Minjoong<< ⚠️Tener discreción, si en tal caso la trama no te llega a gustar o te sientes incomod@ leyendo evita dejar malos comentarios y retírate pacíficamente⚠️ » HISTORIA ORIGINAL @Itzeel_Hdez »NO...