[Cinnamon]

Capítulo 5: "Love Song II"

—Buenas noches héroe número uno, hombre más sexy sobre la tierra y mi novio hermoso que tanto quiero. - Hawks se acurrucó entre sus brazos cerrando sus ojos.
—Buenas noches, ángel - Endeavor beso la frente del menor, le observó dormir por unos minutos y luego se quedó dormido con él entre sus brazos.

A la mañana siguiente Enji despertó con besos de su pequeño novio. Luego de un poco de jugueteo, ambos se metieron a bañar juntos, Endeavor le ayudó con sus heridas y talló su cabello. Al salir le ayudó a secarse e incluso a vestirse. Por su parte, el menor estaba encantado con tantas atenciones.
En el comedor, Hawks se quejó de que todos comían menos él porque tenía que estar en ayunas así que Fuyumi le prometió que al volver le tendría una gran cena preparada, Hawks por supuesto se emocionó cambiando su ánimo por completo.

Enji se encontraba en la puerta despidiéndose de su novio.
—Ten cuidado, puede ser peligroso.
—No te preocupes ángel, te lo dije, estaré bien. - Enji abrazo a Hawks y este beso su mejilla.
—Esta bien, confío en ti - el menor de puso de puntitas y dejó un beso sobre sus labios.
Enji correspondió sujetando sus mejillas.

—Hay por favor, que asco. - Shōto estaba viendo la escena desde la sala por lo que Natsuo continuó
—Consigan una maldita habitación.
Enji puso los ojos en blanco viendo a sus dos hijos.
—Basta, no sean groseros. Debo irme, Natsuo, te encargo a Hawks, sé que lo harás bien.
—No te preocupes, viejo, lo haremos bien. La abuela se ha encargado de todo y ella dijo que se encargaría de supervisar, esta en buenas manos.
—Lo sé y gracias. Gracias a todos ustedes por cuidarlo.
Natsuo se movió algo incómodo, aún no se acostumbraba a tanta amabilidad de parte de su padre. —Lo que sea - dijo el mayor queriendo golpear a Shōto al ver la sonrisa burlesca que tenía.
—Con cuidado ángel, suerte - esta vez beso por última vez su frente y el menor asintió.

Enji salió por la puerta rumbo a las oficinas del gobierno, mientras Hawks saldría minutos más tarde en compañía de Natsuo.

Hawks estaba en la habitación preparándose para su cirugía. Natsuo lo estaba canalizando para ponerle el suero, le dijo a su padre que se encargaría personalmente de su pareja y eso hacía.

—¿Por qué decidiste ser médico? Tengo entendido que todos ustedes tienen un quirk impresionante.
—Quería ser un héroe pero no la clase de héroe que era papá. Ya lo sabes ¿no?
—Bueno, esa es tu perspectiva, porque la mía es completamente diferente. Yo no tuve padres, es decir, sé que los tuve pero fui criado de otra forma. Endeavor-San fue una gran ayuda para mi en momentos difíciles.
—Sí, esta claro que tenemos perspectivas diferentes de ese entonces. Voy a abrir el suero y lo voy a empujar un poco, puede que duela.
—Sé lo que tu padre hizo pero al menos ahora quiere cambiar de verdad. Al menos lo está intentando, hay personas, niños, que nunca tendrán eso. - Hawks se quedó pensando en su situación infantil, incluso en la actual y tampoco pudo pasar por alto la vida Shigaraki y porque situaciones terminó a manos de AFO. No sólo ellos, sino también la liga, rechazados por sus diferencias.
—¿Estas diciendo que lo que hizo no fue tan malo? - Natsuo cruzó sus brazos alzando una de sus cejas.
—No, y él lo sabe mejor que nadie. Lo que digo es que a veces no nos damos cuenta de otras situaciones a nuestro alrededor. Ni siquiera la misma sociedad, están tan acostumbrados a que nosotros resolvamos todo que ni siquiera pueden extenderle su mano a otros, tal vez de esa forma se evitarían muchas desgracias. En cierta parte, es bueno que no quieras ser el tipo de héroes que somos nosotros.

Natsuo le miró algo confundido pero entendía parte de lo que decía. El camillero llegó por Hawks por lo que le ayudó a acomodarse y le siguió a su lado una vez que iban rumbo al quirófano.

—Papá estará aquí cuando despiertes.
—Lo sé, gracias por cuidarme. Todos ustedes han sido muy amables.
—¿Debería de comenzar a llamarte mamá? - Natsou soltó una pequeña risa por lo que Hawks le siguió.
—Es extraño, considerando que Fuyumi tiene mi edad.
—Sigo sin entender que le ves al viejo.
—Todo lo que ustedes no. Incluso estoy agradecido de que tenga hijos tan buenos como ustedes.
—Lo sé, que afortunado eres - Natsuo le sonrió y volvió a reír.