capítulo 10

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Sir y Aila, se mantenían en silencio después de haberle dicho a Liv, que Sir se iría unos días para meditar. Lógicamente era mentira y esperaban que ella se lo creyera.
Liv se mantenía en silencio contemplándolas fijamente y una medio sonrisa ladeada mientras le daba vueltas a uno de los mechones de pelo de uno de sus hombres que portaba en uno de los costados casi rozando su nuca.
Sir sabía por esa forma de mirarlas, que no estaba convencida, que sabía en el fondo que la estaban mintiendo, sabía que eso no quedaría así, y que seguramente no dejaría que se marchara tan fácilmente, más bien, directamente, no la dejaría irse.

Lo que ellas no sabían, es que en primer lugar, ella ya estaba enterada de casi todo, Ebbe ya le comentó en donde fueron y de lo que estuvieron hablando al salir de esa cueva. Lo único que no sabía, era el motivo, pero eso ya era otro tema. Pensaba en si dejarla o no ir al puente de los muertos.
¿ para qué tenía que ir?
¿ porqué no se lo explicaba?
¿ tendría que ver con ella?
Esas preguntas rondaban y rondaban por su mente sin parar. Apenas había dormido en esos días desde que volvieron de las montañas y que Ebbe le contara todo lo que había visto y oído.
Había estado esperando que Sir tuviera por fin el valor de decirle lo que ocurría, pero seguía callada, sin mencionar ningún detalle, ni siquiera a Gyda, a su propia hermana que sabía lo que estaba ocurriendo y tampoco estaba siendo informada, incluso ella tenía la mosca tras la oreja por ello.

Si no la dejaba ir, probablemente, nunca le diría nada, y si la dejaba ir, quedaba como idiota, como si pudieran engañarla fácilmente.  Pensó en ello un segundo.
Hum, podría ser beneficioso que creyeran eso, pero tanto ellas como incluso el resto de su clan, y sus enemigos. Ha veces una tiene que hacerse la tonta y luego por detrás hacer las cosas y pillar a todo el mundo desprevenido.
Desprevenida...podría seguirla, podría también guardar información al resto, sobretodo a Aila, podría mentir ahora, inventarse algo y dejarlas desconcertadas.

No le gustaba la idea de mentir y guardarse información, pero ya que ellas estaban jugando a ese juego, ella también podía hacerlo. Además, no hacía daño a nadie en esta ocasión.  Bien, decidido, la seguiría y ya tenía el plan perfecto para que nadie sospechara y poder hacer la suya con tranquilidad.

— ¿ te irás en mi partida? — preguntaba con calma.

Sir y Aila, parpadearon un par de veces con sorpresa, incluso Gyda y el resto de chicas, Ebbe elevó sus cejas confuso.

— ¿ partir? ¿ ha dónde vas? — preguntaba Sir.

— tú necesitas meditación, y yo algo parecido. Me llevaré a la manada por las montañas, necesito calma y tranquilidad. Me llevaré a Ebbe conmigo para que nadie se preocupe. 

Todos los presentes, se miraron entre si. ¿ porqué no hacía preguntas a Sir?
¿ porqué parecía importarle poco todo eso?

— entonces, ¿ puedo irme ?

Liv sonrió brevemente — si, no veo el problema, necesitas unos días para ti, y tenemos el mismo pensamiento, así que, por que no. — toqueteaba ahora el plumaje de Lur que se mantenía con ojos cerrados por el contacto de su ama y ese cariño que le ofrecía. — solo necesito saber si necesitas que alguien te acompañe en tu viaje, es evidente que si, pero puedes escoger quién.

Sir la miraba con ojos agrandados. Se lo estaba tomando muy bien, demasiado bien. Es que, ¿ ha caso le daba igual? Por una parte, ya le venía bien que no hiciera preguntas, eso le quitaba el peso de encima para no tener que mentirle, pero por otro lado, eso la tenía mosca, parecía fría, distante, como si no le importara nada, como si ella no le importara, aún así, la obligaba a ir acompañada, y si iba con Aila, no cuadraría mucho lo de la meditación, y Gyda, no sería de fiar, aunque era su hermana, su lealtad era para Liv, tenía más amor para su mejor amiga que para ella, no es que eso le importara más o menos, pero entendía ese sentimiento, le pasaba lo mismo, tragó saliva.

LA ERA VIKINGA ( tercera temporada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora