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Tal vez era culpa de Jungkook, tal vez todo lo que hacia para llamar la atención de Taehyung y tratar de arreglar las cosas solo lo estaba aturdiendo. Tal vez este se sentía incomodo con todas las cartas llenas de palabras melosas y frases cursis.

Pero extrañaba tanto decirlas sin que nadie se interpusiera con ello. Extrañaba tanto ver a Taehyung tratar de disimular sus mejillas sonrojadas cada vez que el azabache le regalaba un cumplido. El como sus labios intentaban ocultar su particular sonrisa, fallando torpemente y logrando que Jungkook sonriera igualmente sintiendo su corazón palpitar fuerte contra su pecho. 

Taehyung había puesto su mundo de cabeza cuando creyó que no habría alguien que lograra hacerlo sentir así, menos otro chico. En cada momento que pasaba a su lado lograba descubrir algo nuevo acerca de Taehyung, alguna cualidad, una manera de pensar diferente a la suya pero que de alguna manera siempre encajaba con el. Su manera de hablar sobre temas que el nunca escucharía de otros labios con tanto interés, recuerda aquellas platicas observándolo mirar por la ventana mientras habla sobre el cielo como si lo conociera de pies a cabeza, su ceño frunciéndose tratando de recordar cada dato mientras señala a lo lejos por sobre las nubes. 

Tal vez no haya prestado gran atención a todo lo que decía pero el puchero en sus labios ala hablar y el brillo de ojos eran suficiente distracción. Tantas veces quiso besarle, saber como se sentiría acercarse lentamente tomando con delicadeza su rostro tomándolo por sorpresa, sus ojos asombrados mirándolo a los ojos pero arrepintiéndose al instante sonrojarse. Acercarse un poco mas y por fin unir sus labios. No tiene que ser apresurado, es su primer beso y quiere aprovechar cada segundo para sentir el sabor de sus labios, marcarlo en su mente y guardar ese momento en su corazón. 

Pero ese deseo murió muy pronto, incluso pronunciar su nombre se sentía extraño, todos los momentos juntos se desvanecieron a nada mas que simples compañeros de clase. Que no se hablan, que no se miran, que no se abrazan. Y mucho menos se besan. 

"¿Soñando con besar a Taehyung otra vez?" la voz de Yoongi lo saco de sus pensamientos.

Era muy temprano y el ya se encontraba en el salón de clases mirando por la ventana. El y Yoongi eran los únicos en llegar a una hora tan ridículamente puntual.

"N-No, solo miro el cielo. Solo eso." tartamudeo un poco mirando a su amigo.

"Es lo mismo, el cielo también tiene relación con el." 

Ignoro sus palabras y fue a tomar asiento junto a el, suspirando al recordar lo sucedido con su ultima carta. Ya tenia pensado hablar con Taehyung de nuevo aunque no se sentia muy seguro, ese pensamiento no lo dejo dormir tratando de buscar la manera mas adecuada para acercarse al castaño sin molestarlo ni provocar una escena.

"Hablare con el hoy." las palabras salieron antes de que pudiera detenerlas. Mierda.

"¿Que quieres que te diga, Jungkook?" hablo serenamente el otro girándose para observarlo.

"Puedo decirte mil veces que dejes de seguirlo, que solo te estas lastimando al hacerlo y que no vale la pena pero," tomo el mentón del azabache para que lo mirara "nunca me harás caso."

Pudo sentir el ardor en sus ojos, lagrimas acumulándose pero no quería llorar, no quería hacerlo ahora. Sintió la mano de Yoongi alejarse, su mirada llena de preocupación lo hacia sentir tan mal, solo quiere lo mejor para el pero no puede evitar lo que siente hacia el castaño.

"Lo amo." apenas pudo pronunciar para después sollozar dejando caer las cálidas lagrimas por su rostro. 

Cubrió su rostro tratando de calmarse pero solo empeoro al sentir los brazos de Yoongi rodearlo con fuerza, podría jurar que lo escucho llorar también. 

¡NO TE ENAMORES! | KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora