Capítulo 2: Despertando bajo el sol

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Unos a veces regresan antes que otros.

Los deseos pueden ser peligrosos y traer lo que más extrañes a tu vida nuevamente.

Hace algunos años...

Wen Chao siempre fue mimado por la indiferencia de su padre pero desde que lastimó a su ahora hermana entró en pánico. Él temía a su padre y a las represalias que traería lo que hizo.

-¿No recuerda nada? - Chao estaba incrédulo y feliz - ¿Seguro?

-Sí, ella no recuerda nada del accidente.

La mejor noticia del mundo, hasta que Wen Xu entró golpeando de par en par las puertas.

-¡Chao!-miraba con furia.

-¿Sí?

Un carruaje se descarriló después de asustar un caballo y hubo una víctima que traía yerbas medicinales en una canastilla.

Qing cuando despertó vio a Wen Chao en la cama con un chichón en la cabeza, al lado dos jóvenes más, un joven tranquilo y asustadizo, parecía un algodón de azúcar y uno tan guapo como un ídol y de un genio terrible.

Wen Qing era el nombre de esta señorita, la ex bombera miró al espejo cercano y espantada se reconoció pero más joven y con ropa diferente.

-¿A-Li? ¿A-Yang?

Las lágrimas se impedían salir y su cabeza daba un sin fin de vueltas.

-¿Shijie... qué te pasa? -la voz del más tímido parecía temblorosa.

-¿Shijie? -la cabeza dio más vueltas con agarrarse un poco todos entendieron que por el golpe debería descansar.

El líder del clan Wen castigó por primera vez a su hijo corrigiendo con severidad su comportamiento.

El primer cambio de esta vida, ya sucedió, a partir de este punto ya nada sería igual.

Por otro lado, Qing comenzó a entender que sucedía, por un tiempo busco en libros y noto que faltaba actualizaciones significativas para el mundo. Cuando se recuperó más intentó hacerse pasar por la verdadera dueña de ese cuerpo, pero le fue más difícil de lo que creyó.

Para empezar, ella no sabe medicina, no la de este lugar extraño, pero, sabe primeros auxilios básicos y alguno que otro conocimiento cuando estudió en la escuela de medicina; y el tener todo el repertorio de recuerdos de la dueña real no es suficiente como para llamarse a sí misma doctora. Una cosa es la práctica y otra es la teoría y Qing sólo tenía teoría a su disposición.

Segundo, en su vida ha utilizado una espada, quizás una pistola pero no una espada, un arma tan "rudimentaria" que si la viesen usar sus hermanos de su otra vida se burlarian sin tener piedad.

Tercero, extraña su vida, la que recuerda es suya y no sabe qué pasó después del suceso que la llevó hasta ese lugar.

Cuando regrese, ella se encargará de hacerse justicia y acabar con ese desgraciado que...

-¿Ya despertó? -Preguntaba un frío hombre - cuando lo haga díganle que quiero que vaya a la oficina...

-Sí líder.

La curiosidad la mata. Apenas escucha eso sale de su escondite, habla con el líder de ese clan con algo de temor.

El hombre es tan alto y coloso para ella. Y su actitud semi fría y con exigencia en su acento hace que su cuerpo reaccione con miedo si es regañada por él.

JUGANDO CON LA HISTORIA - MDZS (Rediseñando/Arreglando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora