Jimin se encontraba listo y preparado para su primera lección de boxeo, era un lunes y había terminado temprano de limpiar la cancha solo para poder ver al pálido lo antes posible.
Llego a el cuarto de boxeo, tenia hasta un ring para algunas competencias que hacían en las clases, pero como ya todos se habían ido, solo estaban ellos.
— Muy bien, lo primero que tienes que saber es que siempre tienen que proteger tu rostro.— Puso sus manos a cada costado de su cabeza para dar el ejemplo.— Y flexiona las rodillas, tienes que tienes que estar ligeramente agachado.
— ¿Así?— Preguntó imitando torpemente la posición de Yoongi, el cual soltó una pequeña risa burlona.
— Tienes que estar firme, pone tus brazos y piernas tiesos.— Jimin asintió y hizo caso.— Ahora, tienes que aprender de reflejos, voy a mover las paletas y tienes que pegarles lo más rápido... posible apenas se mueven.
— Bien.
(...)
— Ah.— Se quejo.— No más, estoy demasiado cansado.— Dijo el rubio que repentinamente cayo al suelo.
Yoongi se sentó en el suelo frente a Jimin, a quien le bajaban gotas de sudor por los costados de su rostro, cosa que le pareció de alguna forma perfecto.
— Te ves demasiado tierno con los guantes de box.— Al momento de decir eso se trago su propio aire y quedo mirando el suelo.
— Eh, b-bueno, gracias p-por la clase, debo a ir a estudiar.— Realmente no quería irse, le había encantado que le dijera "tierno", tanto que se puso tan nervioso que termino huyendo.
— Tonto, tonto, tonto.— Se golpeo con la palma de su mano viendo como el rubio salía de la sala.
Fue hasta los guantes que había usado Jimin y se los puso, posiciono el saco de arena y empezó a golpearlo, los golpes resonaban fuertes en la habitación, tanto así que no vio como un rubio se asomo por la puerta para venir a buscar el celular que había dejado.
A Jimin se le cayo la baba al ver a Yoongi en esa faceta, tenia la frente sudada, en sus brazos, aún que no eran gruesos en extremo, se le marcaban la venas y músculos cada vez que golpeaba el saco, estaba completamente concentrado.
Inconscientemente se muerde el labio, pero borra esos pensamientos casi al instante, y simplemente se adentro para buscar su celular, lo que advirtió la atención de Yoongi.
— S-Se me olvido mi celular.— Yoongi mira como lo toma del banco en donde lo había dejado.
— C-Claro.— Jimin finalmente se va dejando, nuevamente, a Yoongi solo.
Camino por los pasillos respirando pesado, toco su pecho y se apoyo en unos casilleros.
Okey, necesitaba relajarse un rato
Le hablo a Taehyung y le pidió que trajera un parlante a la cancha de basquetbol, la única manera de relajarse era bailando.
— Bien, por primera vez te veré bailar, adelante.— Dijo Taegyung sentado en el piso.
Una música melodiosa y empezaba a sonar y Jimin simplemente se dejo llevar.
Era extremo que se sintiera así solo con ver a Yoongi, necesitaba canalizar sus sentimientos, quizá estaba siendo demasiado notorio cuando el pálido solo era amigable con el, ¿Cómo seria su amigo si se ponía nervioso cada vez que se le acercaba un poco? ya no quería olvidarse de aquel chico, se sentía bien a su lado, pero debía aprender a ocultarlo.
Simplemente le ponía nervioso tenerlo tan cerca, poder apreciar su rostro quizá seria un privilegio si no le gustase, porque ha descubierto que al parecer toda la sangre de su cuerpo solo se acumula en su rostro cuando lo hace.
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The son of Eros ♡ || Yoonmin
Fanfiction[COMPLETA] Jimin era hijo de Eros, si el dios del amor, el cual a penas supo el don de su hijo lo encerró en su casa. Muy pocas personas habían visto al chiquillo y se rumoreaba de que era tan bello como Afrodita, pero nadie tenía la certeza de que...