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Se froto los ojos, miro al rededor, todo estaba oscuro, era demasiado temprano para estar claro.

"5:14 A.M"  

¿Cuando había llegado a su habitación? lo ultimo que recordaba era haber aceptado la invitación de Hoseok para bailar.

Froto su cara de nuevo y  prendió su mesita de noche.

Pego un salto que hizo que su cabeza se diera contra la madera de la cama de arriba.

Yoongi estaba acostado en la cama de al lado, plácidamente, relajado, todo lo contrario que se entraba Jimin, tratando de recordar como el había llegado ahí y porque Yoongi estaba en su cuarto. 

— Dioses...¿Que me paso?— Dijo en un susurro y se paro silenciosamente para ir a buscar algo de comer, se dio cuenta de que tenia la misma ropa de la noche, así que rebusco un buzo suelto y un polo simple, realmente hacia frió por las mañana. Se vistió en el baño y puso ver lo desastroso que se encontraba su maquillaje, se lo quito y fue a  comer.

Encontró un recipiente en donde él mismo había guardado mochis que había hecho el día anterior.

— Mhm, muero de hambre.— Dijo para si mismo. Se puso dos y un trozo de bizcocho, se preparo un café para combatir el frió. 

Prendió la televisión, aún en las noticias, sobre todo de farándula, seguían hablando de su revelación, nunca imagino que su vida, su rostro y lo que hiciera seria tan importante, o sea sabia que era un tema que se hablaba, pero nunca pensó que tanto.

Termino su comida y fue directo hasta su habitación, miro el rostro del chico que había aparecido ahí por sorpresa, suspiro y se agacho para poder apreciarlo más de cerca, ¿Qué pensaría si lo viese de esta forma? ¿Qué pensaría si le dijera que en esos cortos tres días había logrado generar un sentimiento en el?

Pronto sus ojos de humedecieron y la imagen del chico se empezaba a ver borrosa, ¿Seria capaz de enamorarse algún día? ¿O que alguien lo ame de manera genuina?, solo quería que el día de su revelación llegara para poder ver cual seria su don definitivo y como podía aportar, porque si se quedaba con esto para siempre, fragmentaria su alma definitivamente, se sintió tan impotente, pensaba que este don era simplemente algo que le haría hacer cosas sin razón, sin intensión y más cosas como las de ayer en la cafetería sucederían, ¿Y si le llegaba a pasar con una persona que tuviese pareja? podría romper una relación.

Dioses necesitaba calmarse.      

Froto su cara, limpio sus lagrimas, se paro y se fue a su cama. 

— ¿No vas a seguir mirándome?— Pregunto Yoongi despertando completamente.

— ¡E-Estabas despierto!— Dijo y oculto su cara en un cojín.

El pelinegro se sentó en  la cama del rubio y retiro en cojín.

— ¿Me vas a decir porque llorabas?— Pregunto viendo el rostro de Jimin, el cual negó con la cabeza, a punto de llorar de nuevo.— ¿Quieres un abrazo?

— ¿Me darías uno si te dijera que sí?— Contra pregunto el rubio, quien se encontraba un poco confundido ante la propuesta de Yoongi.

— Sí.— Sincero el pálido y abrió sus brazos hacia Jimin que no dudo más en abrazarlo y sentirse cálido con sus brazos al rededor, por un segundo hasta se sintió familiar. Dejo la calidez que emanaba el cuerpo de Yoongi lo consumiera y se permitió sentirse protegido y seguro a su lado, sonrió sobre su pecho.

— ¿Mejor?— Dijo acariciando el cabello de Jimin, quien solo asintió contra su cuerpo.

Luego de un rato se separaron.

The son of Eros ♡ || YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora