-Buenas noches Boggi.
-Buenas noches Hera.
Trato de poder dormir, pero no puedo, me volteo dándole la espalda a Boggi.
Pero entonces, pasa.
Bogdan quita la almohada que había puesto, y lo siguiente que siento es el brazo de boggi jalándome hacia él hasta que mi espalda está contra su pecho. Puedo sentirlo completamente pegado a mi espalda, todo de él.
Me va a dar un infarto.
Boggi me presiona aún más contra él, su respiración rozando mi oido, -No puedes dormir eh?
¡Diosito santo, protégeme!
Puedo sentir mi corazón latir desesperado en mi pecho, estoy segura de que Boggi también lo siente, él sigue pegado a mi, el calor emanando de su cuerpo calienta mi espalda.
Su mano está sobre mi cadera, y los nervios hacen que mis músculos se tensen y mi respiración se acelere.
El aliento caliente de Boggi roza un lado de mi cuello, haciendo que se me ponga la piel de gallina. Lentamente, la mano de Boggi se mueve hacia arriba por encima de la camiseta hasta llegar a mis costillas, dejo de respirar, su mano se detiene justo debajo de mi pecho izquierdo y se queda ahí.
-Se te va a salir el corazón -Su voz es un susurro en mi oído, mojo mis labios.
-Yo- yo.
Los labios de Boggi rozan mi oreja -¿Tú? ¿tú?
Él comienza a dejar besos húmedos por mi cuello, subiendo para lamer el lóbulo de mi oreja. Siento mis piernas debilitarse ante la sensación de sus labios en esa parte tan sensible de mi cuerpo.
-Sabes, no dejo de pensar en ti, y sé que no debo, pero me es imposible.
Sus palabras me quitan el aliento, y cuando estaba apunto de hablar, su mano baja de mi pecho a mi cadera y me aprieta hacia él, y es ahí, cuando siento su obvia erección sobre sus pantalones contra mi espalda baja. Se que esto no está bien, y que debería alejarme pero su lengua lame, sus labios chupan, sus dientes muerden la piel de mi cuello volviéndome completamente loca.
No caigas en su juego Hera.
-No tienes que fingir Boggi, solo quieres vengarte, -murmuro, pensando que así por fin se dará por vencido.
-¿Vengarme?- Sonríe en mi piel, su mano subiendo a mis pechos una vez más, pero está vez si los masajea descaradamente. -¿Vengarme de qué? -tiemblo en sus brazos, es la primera vez que un chico me toca de esa forma.
-No lo se, dime tú. -digo, mordiendo mi labio para aguantar un gemido.
-No quiero vengarme.
Lamo mis labios, -¿Entonces qué es lo que quieres?
Sus manos dejan mis pechos, y baja, sus dedos trazando mi estomago por encima de la camiseta, brinco cuando su mano toca mi entrepierna, -Esto es lo que quiero.
Ok, eso me quedo muy claro.
Boggi toma el borde de la camiseta que llevo puesta y la desliza hacia arriba en una velocidad dolorosamente lenta.
Mi corazón está latiendo a mil por hora.
No tengo ni idea del porque estoy dejando que Boggi me toque de esa forma. O bueno tal vez sí lo sé, la verdad es que Boggi siempre me ha atraído. Sí ya lo dije.
Un ligero murmullo de negación deja mis labios cuando Boggi mete su mano por debajo de la camiseta, sus dedos se mueven arriba y abajo por encima de mi ropa interior.
ESTÁS LEYENDO
Basquetbol-BG
أدب الهواة-Oh, ¡mierda!- Exclama Natalia, viendo atrás de mi, sin despegar la vista de ahí. -Joder!, Hera no voltees por lo que más quieras- ruega Samy. -¿Qué? ¿Por qué?- suelto. Y eso me hace querer voltear. Y me arrepiento profundamente de haberlo hecho. Oh...