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✨10 años 🌈✨

[......]

Los niños por el campo de fútbol, persiguiendo el balón con velocidad mientras algunos lo veían con atención o los apoyaban con gritos alentadores. Jeong-in no siempre podía ver el juego ya que tenía distintos horarios que los chicos de último año, por lo que cada vez que iniciaba un juego el tenía que esperar a sus padres para poder ir a casa.

La salida nunca fue entretenida para el, sus amigos eran los primeros en irse y la mayoría del tiempo tenía que esperar solo sentado en un escalón a uno de sus padres.

Se sentía solo y aburrido, no podía hacer nada más que esperar.

Algunos estaban igual que el, solos en un escalón o esperando en el salón pero a diferencia, ellos tenían móviles para poder entretenerse. Más de una vez el chico suplico a Papá de llevar el móvil a la escuela, pero siempre recibía un "No" ya que podía distraerse y podrían pillarlo usándolo en clases. Solo podía usarlo en casa, no es la edad correcta para que un niño tenga móvil pero le ha servido de mucho para comunicarse con sus amigos, familiares y sus padres en cuanto salen o el se queda en una pijamada. No fue un mal gasto después de todo.

El sol no estaba tan fuerte para ser un buen día de verano, las nubes lograban opacar los rayos y la brisa fresca ocultaba el calor.

— ¡Cuidado! No te acerques a él — murmuraban los estudiantes a su alrededor — escuché que te contagiará una enfermedad.

Los niños se alejaron rápidamente del sector donde estaba el chico, susurrando cosas horribles y riéndose de falsos rumores que decían sobre el.

— Es asqueroso...

— ¡Vomitare si se atreve a hablarme! — exclamaba uno de ellos.

Cada palabra era una puntada en el corazón de Jeong-in, sus garganta fue cerrándose impidiendo de que soltara una sola palabra y sus ojos ya estaban cristalinos. Era doloroso, muy doloroso.

— ¡Jeong-in Idiota! — vocifero a lo lejos un chico de cabellera oscura como la de él, la tes blanca como la misma nieve y sus ojos tan finos como el de una fiera. — ¿Eh? ¿Por qué estás sólo? ¿Tus padres finalmente te abandonaron? Que desgracia — soltó.

Los niños que lo acompañaban solo carcajeaban en su cara, aumentando el dolor en su pecho.

— Que cruel Hyunjin — soltó uno de ellos seguido por una carcajada — Ya hiciste llorar al marica.

— ¡Marica asqueroso! — gritó el otro. — Mi madre me dijo que tus padres te contagiaron, de seguro que es verdad...

Todos comenzaron a reír con gozo y malicia, las carcajadas aumentaron entre la multitud, mirando al pequeño azabache con asquerosidad y pena.

— Me das asco — dijo Hyunjin acercándose cada vez más al azabache — Tus padres no deberían existir. Les deseo la muerte...

Sus miradas se encontraron como si fuera lo último que tenían que hacer antes de comenzar la batalla. Los ojos cafés de Hyunjin no lograban brillar con el sol, logrando que se vieran más profundos y a la vez penetrantes. Podría llorar enfrente de él como acostumbraba hacerlo, liberando su dolor cada día para llegar vacío a su hogar.

Pero esta vez no será así..

Su sangre hervía de la furia y frustración, sus lágrimas desafortunadamente comenzaron a caer y sus puños fueron sus palabras.

¡𝐏𝐚𝐝𝐫𝐞𝐬 𝐩𝐫𝐢𝐦𝐞𝐫𝐢𝐳𝐨𝐬! (𝟐𝒋𝒂𝒆) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora