t w e n t y o n e

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En otra época a Minho le hubiese molestado la actitud tan pegajosa de Jisung hacia él, pero ya no. El amor que sentía por él no le dejaba molestarse con casi nada

El rubio se la había pasado durante el juego de croquet acariciando sus biceps, su cabello y de vez en cuando enrollaba su brazo con el suyo, pero nunca lo soltaba y lo seguía a todas partes muy cerca.

Minho comprendió que lo que Jisung quería más que nada eran mimos, y aunque él se los podía dar mientras jugaban con sus padres, se le hacia algo incomodo con ellos ahí y el resto de caballeros que los observaban

Luego del juego, El Rey se llevó a su hijo para hablar con él en privado, dejando a Jisung con su suegra. El rubio comenzó a jugar con sus dedos, queriendo ir con Minho, sintiendo un frío al no tenerlo con él.

— ¿me acompañas? — le preguntó la Reina, invitándolo a caminar junto a ella y Jisung asintió con tal de distraerse un poco de Minho

Al principio hubo un pequeño silencio que la señora Lee rompió cuando estaban algo solos. Tomó una bocanada de aire y le pidió perdón a Jisung

— ¿p-porque? — preguntó el rubio

Sin hacer contacto visual con él, le respondió: — vi tu reacción cuando te mencioné lo de los cachorros... Puedo notar fácilmente cuando a alguien le incomoda o molesta algo

Jisung se sonrojó, mordiendo sus labios

— perdóname si te presioné un poco — suspiró — ¿sabes? Mi esposo y yo ya estamos algo viejos y... tememos no ver a nuestros nietos...

Jisung hizo contacto visual con ella

— y no te sientas presionado ni nada, no son mis intenciones, pero enserio me gustaría ver a mis nietos jugar y correr por estos jardines — su suegra comenzó a sonreír y luego volvió a estar seria — ahora dime Jisung, ¿que piensas al respecto?

— y-yo... — Jisung tragó saliva y sus manos comenzaron a temblar ante la idea de cargar con bebes

La Reina se detuvo cuando escuchó sollozos venir por parte de Jisung.

— realmente lo siento — dijo el rubio mientras cubría su rostro, avergonzado por llorar frente a ella

— ¿que tienes Jisung? ¿Te ocurre algo malo? Puedes contármelo, confía en mi — La Reina le ofreció una sonrisa

— t-todos quieren que tenga cachorros, hasta Minho lo quiere y yo no sé si quiera... —Jisung no paraba de limpiar sus mejillas sonrojadas — no me siento listo...

La Reina solo rió suavemente: — Jisung, ¿sabes que Minho y tú pueden intentarlo durante su celo?...

Jisung suspiró, debía contarle todo para que lo comprendiera y así lo hizo. La expresión en la cara de La Reina cambió

—... y no se lo he dicho a Minho porque pienso que me dejará... — Jisung sollozó

— Jisung querido, él nunca te haría eso. Lo conozco bien — le respondió ella rápidamente

— ¿que sentido tiene estar con un Omega que le teme a ser complacido y a tener cachorros? — susurró Jisung

La señor Lee dio un largo suspiro: — tal vez no sea la indicada para decir esto, pero no tienes por que sentir miedo...

Luego se acercó a él y colocó una mano en su hombro: — es una de las experiencias mas bonitas que tendrás en tu vida, y no miento — sonrió ladina — y en cuanto a tener cachorros... no te preocupes si sientes que no sabes cuidarlos, eres Omega y ese instinto protector hacia tus hijos ya está en ti...

My KingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora