🍋 Sin compromisos 🍋

461 23 2
                                    

🍋 Advertencia este capítulo contiene Lemmon leer bajo tú responsabilidad xdxd ⭕

Kakashi se encontraba en el consultorio para mascotas, haciendo el típico chequeo a sus perros después de cada misión. No le molestaba en absoluto, le daba tiempo para leer su libro, además, la veterinaria era muy atractiva y al peliplata le llamaba la atención, pero no quería nada formal. Y ella se veía de esas chicas que no les gustaba un encuentro nada más. La mirada de Kakashi hacia las caderas de la mujer no pasó desapercibida para Pakkun, quien era el último por ser revisado.

— Está todo bien, solo tienes que descansar —informó la mujer sin despegar la vista de los resultados de los exámenes. —. En general Kakashi- Sensei, todo tu escuadrón se encuentra en perfecto estado, solo necesitan descansar.

La mujer se dió la vuelta y se agachó para al alcanzar la prenda de Pakkun, kakashi no pudo evitar ver cómo la falda revelaba un buen trasero, el cachorro lamió su pata, listo para hacer una jugada.

— Acá tienes —entregó la mujer incorporándose, —, ¿Algo más en lo que te pueda ayudar?

— No —contestó Pakkun mordiendo la prenda—. Al menos no a mí, pero a él —vió a Kakashi—. Estoy muy seguro que si.

Una nube gris apareció al instante, dejando a los adultos solos en el consultorio. Kakashi no sabía que hacer, notaba que la veterinaria estaba sonrojada y no entendía porque. Intento moverse y sintió algo raro en sus pantalones, comprendió al instante porque la mujer había reaccionado así. Veía a todos lados nervioso, buscaba impacientemente algo con que taparse, la mujer río ante el intento del peliplata.

— Kakashi —lo llamó, acercándose a él—, desde hace tiempo se que me has estado viendo de una manera no tan profesional. La verdad, hace tiempo que terminé con mi pareja, y quisiera solo —se detuvo—, hacerlo, sin compromiso. Se que tú eres igual, entonces, ¿Que te parece ayudarnos mutuamente? —, preguntó con picardía, a lo que Kakashi respondió asintiendo.

No se esperaba que todo fuera así, ella quería lo mismo que él, solo sexo, sin ningún tipo de compromisos. Olfateo el deseo de la mujer, esto lo excitó aún más. Ella estaba lista para acogerlo. No existiría un juego previo, solo complacerán ese deseo. Cargó  a la mujer y la sentó en la camilla. Ella levantó su falda y bajó sus bragas con urgencia. Kakashi por su parte, bajó sus pantalones junto con los bóxers hasta su rodilla. La castaña intentó bajarle la mascarilla pero el del Sharingan se negó rotundamente.

— Dijimos que sin compromiso —habló, colocándose un preservativo.—, y yo no me quito la máscara, si lo hago, sería con la persona con quién comparta mi vida, —se detuvo—, lo siento.

No dejó que respondiera, pues introdujo su miembro en una rápida embestida. Ambos estaban necesitados de satisfacerse, Kakashi la embestía rápidamente, ansioso por escuchar el próximo gemido de ella, mientras que la chica, seguía el ritmo con sus caderas profundizando aún más cada embestida.

— ¡Ah! No lo haces tan mal —admitió la mujer gimiendo. Kakashi jadeaba con placer, extrañaba esa sensación, llevó una de sus manos hasta la camisa de la mujer, abriéndose paso hasta su sostén, quería tocar su pecho, llevarlo hasta su boca, pero ella se lo impidió.

— No, no te mostraré mis pechos, solo lo haré con la persona con la que compartiré mi vida —repitió las mismas palabras que el le lanzó. El peliplata bufó levemente molesto y aumentó el ritmo — ¡Kakashi!

Era una lástima para él, pues la mujer tenía un buen tamaño de pechos. Pero siendo honestos, le pareció justo, y hasta una muy buena jugada de parte de la mujer. Rió al pensar que le regresó la moneda. Sintió como la mujer le apretaba fuerte el hombro, le jalaba con fuerza su cabello y gritaba su nombre, sus gemidos se intensificaron, supo que ya se iba a venir, así que la cargó teniendo aún más libertad y con la ayuda de su fuerza, profundizó más sus penetraciones.

— ¡Ah! ¡Ah! —gemía continuamente. Se aferró aún más al cabello de kakashi y de sus hombros, hasta que sintió una gran energía siendo liberada —, ¡Ah, Dios!

Kakashi sonrió orgulloso ante la vista que tenía. Una mujer con los ojos cerrados y su sonrisa expresándole que acaba de tocar el cielo. Pero el quería más. Bajó a la mujer y se separó de ella levemente, la colocó en cuatro, con sus manos en la camilla y la penetró con fuerza. Si no iba a disfrutar de sus pechos, al menos lo haría con su trasero.

— ¡Joder! —gimó el muchacho, aferrándose de la cintura y penetrándola deliberadamente.

— ¡Ah Kakashi!

— Tienes un buen trasero —admitió extasiado por el placer. Inclinó más a la mujer, para tener aún más acceso, —, Acá estás aún más apartada —dijo penetrandola con profundidad—, Mierda —, Jadeó con los ojos cerrados.

Sintió como poco a poco él ya está llegando a su límite.

— ¡No pares! —rogó la mujer—, yo, otra vez

Kakashi asintió desde su posición, iba a aguantar lo más posible, para que ella tuviera otro orgasmo, aunque eso no haya sido su intención desde un principio. Se descontroló totalmente, su ritmo ya no tenía un patrón definido, se tornó más frenético.

— ¡Kakashi! —gritó la veterinaria clavando sus uñas en la camilla. — ¡Ya! —, dijo por última vez, mientras le daba la bienvenida a su segundo orgasmo.

El peliplata se dejó llevar, después de 4 embestidas profundas, llegó al clímax.  Ambos se quedaron un par de minutos así, disfrutando de las sensaciones del momento.

— Eres muy bueno —admitió la mujer incorporándose, mientras se acomodaba su ropa.

— Tú lo hiciste bien —respondió Kakashi arreglando su cabello.

— Sin compromisos —dijo la mujer sonriendo.

— Sin compromisos —aceptó kakashi. A pesar de que ya lo habían dejado claro desde un principio. No era impedimento, por volver a repetirlo unas cuantas veces más.

One-shots Kakashi, el ninja que copia. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora