Capítulo 30

2.7K 354 261
                                    

|Los buenos mentirosos también son descubiertos, tarde o temprano

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


|Los buenos mentirosos también son descubiertos, tarde o temprano.|

Adrenalina.

La adrenalina recorría cada uno de mis músculos haciendo que me tensara ante la escena que contemplaba aún escéptica.

No podía ser verdad.

Desde que Grayson había pronunciado aquellas palabras el más profundo e inquebrantable silencio había inundado la sala provocando que quedásemos en silencio, todos los ahí presentes teníamos la boca cerrada a la espera de que de sus labios saliese la próxima bomba.

Sus ojos verdes brillaban ante el reflejo de la luna empañados de dolor, varias lágrimas caían mientras miraba a Dakota que le devolvía la mirada incrédula sin creer lo que esté acababa de pronunciar.

La morena tenía el rostro descompuesto como si todavía no asumiese lo que había dicho el que teníamos en frente, como si de un momento a otro Grayson fuese a decir que era una especie de broma.

Pero no fue así, el silencio seguía haciendo acto de presencia erizándome la piel.

El asesino por su parte sonreía, no podía verle el rostro, pero sabía que una cínica sonrisa se escondía tras aquel pasamontaña, todo en él denotaba que esta situación se le hacía sumamente divertida, le gustaba vernos sufrir.

Era parte de su juego.

—Se acaba el tiempo, Mourry. —expresó I.K apretando el arma con más fuerza contra la sien del inmovilizado.

Grayson cerró los ojos dejando que varias lágrimas atravesasen sus mejillas hasta llegar a sus labios, su cuerpo estaba completamente tenso ante la situación.

Cuando por fin abrió los ojos, su mirada se dirigió a mí, sus orbes verdes denotaban el más profundo arrepentimiento.

Parecía como si se disculpase por lo que iba a decir.

Asentí dándole paso a sus palabras.

En estos momentos no sabía bien como sentirme, nos había mentido, pero su vida seguía en riesgo, teníamos que acabar el juego.

No podíamos permitir que el psicópata nos desestabilizase, si le recriminábamos algo a Grayson todo estaría perdido, I.K le mataría.

Por mucho que la decepción me ardiese contra las costillas haciéndose presente cada vez más en la boca del estómago tenía que ser más lista, tenía que ser fuerte.

No podía dejar que esta situación me dominase.

No ahora.

Grayson tomó aire comenzando a hablar:

—Nuestros padres...—comenzó a temblar a medida que hablaba, su mirada viajó de Ian a mí rápidamente. —Llevan una red ilegal. —finalmente soltó. —Juro que no sé muy bien de que se trata. —lloró con sinceridad. —Sólo sé que os traicioné por proteger a mi padre.

Mentiras Peligrosas ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora