Capítulo 32

2.6K 331 221
                                    

|Las mentiras son como el fuego, cuando más juegas más se esparce por todas partes

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

|Las mentiras son como el fuego, cuando más juegas más se esparce por todas partes. |


—¿Por qué hemos llegado hasta aquí?
—inquirí en voz alta aun sintiendo como el pecho me subía y bajaba a alta velocidad.

La sala que nos envolvía era amplia pero aun así el aire allí dentro se sentía completa y totalmente irrespirable, era denso, frío, la muerte emanaba de cada esquina de la sala haciendo que la sensación de incomodidad me recorriera de la cabeza a los pies en forma de escalofrío, la imagen no podía ser más lúgubre.

Observé a mi alrededor parando en seco en la cara de Grayson, este miraba todo aún sin comprender bien que hacíamos ahí, sus ojos se encontraban fijos a las paredes de color verde aparentemente ensimismados en algún pensamiento que no fui capaz de escudriñar.

No hizo falta que nadie hablase para preguntarle el porqué de su expresión ya que el del pelo castaño abrió la boca para expresarlo.

—Nunca había estado aquí. —soltó el de las pecas de repente en un tono dubitativo.—No sabía que tuviésemos un sótano a doble altura, llevo desde los diez malditos años viniendo aquí cada día y no lo sabía. —apretó los dientes al pronunciarlo.

La expresión en su cara se palpaba con amargura, la decepción, el miedo.
Puede que incluso la rabia se reflejara en aquella expresión confundida e impactada por la sorpresa de aquella escena desconocida para todos, pero sobre todo para él que creía conocer el lugar al que habíamos llegado.

Conocía bien esa sensación, la confusión y la rabia.

No conocer totalmente a la persona que te había criado era algo totalmente terrible.

Descubrir que durante años has sido ajeno a la verdad era algo que había experimentado en mi propia piel, era algo que aun sentía.

Un pinchazo se expandió en mi interior a causa de aquel pensamiento fugaz.

—¿Qué hacemos ahora? —Dakota sacó un hilo de voz haciendo que todos focalizásemos la atención hacía ella.—Nuestros coches tienen que estar a muchos metros de aquí, si no salimos rápido I.K podría hacer cualquier cosa.

Cerré los ojos tratando de centrarme en pensar como lo haríamos pero lo único que pasó por mi cabeza fue toda la información que había sido descubierta hoy, no podía evitar que me afectase, mantener la mente fría estaba siendo algo imposible en estos momentos.

Lo estaba intentando con todas mis fuerzas, estaba tratando de que esto no me afectase. Sabía que no podía dejarme llevar por mis sentimientos pero todo lo que hervía dentro de mí quería salir, el dolor era insostenible sobre mis hombros.

Pesaba demasiado.

Deslicé mi espalda por la pared hasta quedar en el suelo, todo lo que sentía dentro de mí explotó sin previo aviso como una supernova, explotó deshaciéndome en pequeñas partículas, descomponiéndome por completo.

Mentiras Peligrosas ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora