❝ sᴀʏ ᴍʏ ɴᴀᴍᴇ ❞ | SeongJoong

❖ Capítulo 10. Esperanza ❖

Por más sorprendido que estuviese, Yunho no podía mostrar ninguna emoción en ese momento porque estaba recién despierto y de milagro estaba logrando procesar todo lo que le decía su amigo.

— Solo dime que aún conservas tu sano juicio y no saldrás corriendo con tus cosas ahora mismo.—Contestó incorporándose perezoso, sabía que Park era completamente capaz.

Inmediatamente después de recibir una respuesta negativa volvió a acomodarse en su cama; falsa alarma.

El contrario rió un poco al sentir como su mejor amigo farfullaba gruñón a través del teléfono; Yunho realmente amaba dormir y no podía culparlo. Él participaba en muchísimos eventos como bailarín de respaldo para artistas musicales y últimamente estaba recibiendo muchas ofertas de grandes compañías para empezar a bailar con grupos con una fama más globalizada; claro que, esto le supondría tener que estar bastante más tiempo fuera de Corea y por consiguiente tendría más faena y menos tiempo para desconectar.

— Siento haberte molestado Yuyu, pero siempre has estado conmigo en lo malo; por lo que pensé que debería compartir lo bueno también. —Se disculpó un poco avergonzado por lo que estaba a punto de decir.— Te... quiero mucho.—

Una risa ronca y avergonzada se escuchó a través del teléfono.

— Venga Hwa... Sabes que no me gustan estos momentos sentimentales. —Respondió con humildad y un tono dulce.

— Lo sé... pero quería decírtelo. 

— Está bien, es lo que hacen los amigos. —Dijo para después bostezar involuntariamente.— He de dejarte, mañana madrugo... Buenas noches, guapo.—Se despidió para después colgar.

Seonghwa sonrió para sí mismo con ternura y a la vez una flamante euforia en su pecho. Al fin podía ponerle fin a todo ese sufrimiento y hacer lo que quisiera; bueno, tenía la oportunidad de hacerlo, otra cosa es que se atreviera.

[···]

La pareja se encontraba en la plaza que les servía como punto de reunión para ir al instituto mientras discutían sobre su próxima quedada. Durante ese mes se aproximaban bastantes días sueltos que eran festivos; pero estaban muy dispersos y era difícil organizarse bien. Tras llegar a un acuerdo, Mingi volvió a fijar su mirada preocupada en una dirección: hacia la calle que solía tomar el pelirrojo para venir; era extraño, no solía llegar tarde.

— Ahí viene. —Anunció Lee como si le hubiera leído la mente.

— Perdón chicos. —Se disculpó tras llegar corriendo a gran velocidad para después emprender su camino diario.

Le sabía mal haberse demorado en llegar, pero había tenido una charla bastante entretenida durante el desayuno con Seonghwa y no podía simplemente dejarla para otro momento; por lo que insistió en alargarlo hasta el final y cuando quiso darse cuenta ya se le había echado el tiempo encima para ir a clase.

— Um... Joong, tenemos que quedar para hacer el trabajo de historia.

— Sí... habrá que contactar con el otro chico también. —Adjuntó inocentemente.

— Ah... Kwan... —Disimuladamente, la pareja cruzó miradas. No sabían si advertir al joven pelirrojo o dejarlo estar para ahorrarle más líos en la cabeza.— Bueno, ya hablaremos con él.—

El resto del camino transcurrió entre charlas banales y algunos silencios incómodos porque aún no se conocían del todo. Y Mingi, quien se supone que tenía que hacer de enlace entre ellos dos, estaba teniendo una charla entretenida con alguien en su teléfono.