Capítulo 3 "Alas negras"

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Frontera entre Rusia y la alianza Elisalina.

Un convoy maltrecho atravesaba una carretera secundaria, poco transitada en la primavera sin duda sería un camino de tierra pero gracias a la temporada de dentistas se había convertido en un camino blanco donde transitar sobre la nieve.

Después del incidente con los tanques y magos enemigos, megumin se encontraba dormida en el asiento trasero del todoterreno.

Era acompañada por un soldado el cual seguía las órdenes de yun yun, la había vigilado todo el trayecto y el sargento el cual conducía el vehículo.

Cuando de golpe el reducido convoy se detuvo.

-Aaah- exclamó megumin al ser arrojada contra el asiento delantero por la inercia.

-¿Pero que está pasando?- dijo mientras se ponía su característico sombrero de bruja.

Ambos soldados estaban atónitos mirando por la ventana lateral, cuando por fin megumin vio una enorme columna de luz dorada la cual, probablemente superaba los 100 m.

Ella tragó saliva cuando el extraño fenómeno cayó como si fuera una cuchilla de acero contra la base de la alianza Elizalina provocando una gran explosión y un temblor que el convoy sintió.

Sargento -¡me escuchan que está ocurriendo ahí!- llamó por radio pero sólo recibió estática.

Soldado -¿qué demonios es eso?-

-¡nos atacan! ¡Repito! ¡Nos atacan!- se escucho por la radio.

-muy bien... ¿quién nos ataca? estamos a menos de un kilómetro podemos ayudar- dijo el sargento fingiendo un tono de voz más calmado.

Un silencio Se apoderó de la radio.

-Es fiam- una segunda columna de luz igual al anterior se formó y atacó de nuevo en la base pero está a diferencia del anterior no causó un temblor al estrellarse contra el suelo en cambio los magos pudieron percibir un sonido de vidrios rompiéndose.

Megumin se incorporó -¡alguien logró anular esa cosa!- se encogió de hombros y dijo con entusiasmo -genial, increíble, seguramente es la líder de la alianza, sé que es muy poderosa-

-¡Fiamma de la derecha!- gritó una voz desesperada en la radio.

El sargento tragó saliva. -repite eso-

La estática volvió a la radio, y una nueva voz dijo -¡es el maldito fiamma de la derecha, el líder del asiento derecho de Dios!¿Traes a los refuerzos?-

El sargento se quedó en silencio por unos segundos mientras, otro estruendo se escuchó a lo lejos.

Se pudo observar un barco de hielo disparando sus cañones laterales, desde los cuales salían cruces de hielo afiladas como espadas qué estallan en el aire, haciendo que el estruendo Se escuchara a varios kilómetros.

-Mocosa ...- dijo el sargento apretando los dientes -¿puedes hacer ese ataque otra vez...con el que destruiste a los tanques?-

Megumin que observó la expresión aterrada del sargento miro hacia abajo con la voz entrecortada dijo -no... utilice... todo mi poder en ese momento... Ni siquiera podría prender una fogata con mi poder ahora-

-Ustedes los otros magos alguno tiene algún poder para acabar con ese infeliz- los magos sobrevivientes encogieron de hombros o simplemente negaron con la cabeza.

-Todos los vehículos vamos a salvar la base de la alianza- gritó al sargento.

Subieron a los vehículos y condujeron a toda velocidad cuando llegaron a un costado de la base una docena de soldados bajo con la intención de tomar a fiama, por sorpresa y por la retaguardia, con la guardia baja con todo lo que tenía balas y magia.

to aru kagaku no acelerator: la última maga carmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora