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-¿Crees que al fin te sientas libre?

-Nunca me he sentido tan libre y cómodo antes de él, -asintió más para si mismo y dió una última vuelta, bajo el silbido del moreno en una de las sillas.- Pero aun así ya está decidido.

-Diablos albinito, ese traje te queda listo para una noche asegurada con solo mostrarle la identificación al de la disco- halagó Namjoon riendo y agitando la mano.- Ya no necesito el certificado de residente, esta 100% asegurado, albinitano sensual disponible 24/7.

Se apresuró a buscar los zapatos a juego con el traje y girarse al espejo de nuevo, sentía que estaba haciendo mal, algo no encajaba. Pero decidió ignorarlo y volvió a retomar la charla ofensiva pasiva de su amigo.

-¿Que dices?

-¿Que quieres decir con albinitano?- hizo un gesto en desagrado con la boca sin despegar los labios.- ¿Es algo relacionado a lo gitano?

-De hecho es la combinación entre albinito y marciano, creo que a pesar de eso alguna chica podras conseguir, al menos una miope que no note eso.

-¿A que te refieres?- se volvió mirándolo confundido.

-Vamos amigo, a menos de que sea fujoshi no quieren estar con alguien que le va al otro bando.

-Espera, espera, ¿desde cuando empezamos a hablar de citas?

-Ah bueno... pues, desde que dijiste que está decidido y antes que estabas planeando hacer algo nuevo en tu vida, pensé que era la hora de salir a establecer círculos sociales, crecerá tal vez un poco más, no más de medio centímetro, tomaras delejor licor cada noche y dormirá como rey en una cama tan suave como nube y almohadas de plumas, tendremos una pelea de almohadas y tu caeras en un dulce sueño cada vez que te galletas con leche.- sentenció orgulloso de su pequeño discurso motivacional.

-Nunca dije nada de citas, yo me refería a algo simple- ladeó la cabeza pensando, los zapatos pulidos en un color negro de marca a juego con el traje y un decorado en plateado apenas visible a un lado, estaba listo.-  Tal vez inscribirme a un curso de tenis, posible golf o si surge básquet.

-Creo que todo me parece una exacta descripción de un viejo ingresando a las 60 años con esperanzas de hacer algo productivo antes de morir, lo único aceptable fue el básquet.

-Además, no le voy al otro bando, soy Jungkook-sexual- río sin ganas y se acercó a la mesita tomando el cuaderno con canciones pequeños versos escritos.- ¿Entonces estás de acuerdo en inscribirte conmigo?

-Vamos Yoongi, una cosa es apoyarte y otra acompañarte... Además estoy consternado- se levantó dando vueltas por la habitación.- ¿Cómo puedes estar tan tranquilo en esta situación?

-Mmm, es como si vistiera para un fin no deseado, notando un precipicio delante y aún así caminando hasta la fatal tragedia.

-Tu mismo creaste el precipicio, vas a tomar champán con tu asesino.

-Claro, ¿pero que se va a hacer?- mostró una suave sonrisa sin despegar los labios y se volvió a meter en el baño.- Ve a revisar si Jungkook necesita ayuda con algo.

-Ahora parece psicótico...

 

El televisor parpadeaba iluminando las restantes sombras donde no alcanzaban los rayos del sol ya bajando, cerrando su sección del día, trabajando en conjunto a su prima lejana la lluvia.

Sus ojos no dejaron de prestar atención a la noticia que estaban transmitiendo justo para acelerar su corazón a mil por horas. Ensanchó con rapidez los costados de la boca y se levantó de un salto. Sorprendiendo a Namjoon quién apenas hacia presencia en la estancia y miraba exaltado la escena, juraba que se veía como una vieja poniendo una mano en su pecho.

Lost In Busan [YoonKook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora