NAVIDAD EN FAMILIA H.S

EPÍLOGO

La Navidad en la casa de los Styles se ha convertido en una
celebración mucho más grande a lo largo de los años.

Con la adición de los hijos de Kristina y ahora los míos, no hay una
silla de repuesto en el lugar.

Estamos apretados y calientes, y el tío de Harry, Fred, ya está
borracho con el ponche de huevo, pero no existe ningún otro lugar en el
que yo prefiera estar.

Nos casamos en nuestro propio día especial de Navidad, hace dos
años.

Estaba embarazada de Tripp en ese momento.

Lo cual ha sido una especie de broma normal en la familia de Styles.

Que se sabe cuándo el amor es verdadero si la novia se queda
embarazada antes de la boda.

Yo no estaba muy segura de cómo se tomarían la noticia de que
Paisley era la hija de Harry. Pero con honestidad, su reacción fue todo lo
que podría haber esperado. Ya habían pasado mucho tiempo con ella
antes de todos modos, pero ahora, la señora Styles encuentra cualquier
excusa para consentir a sus nietos.

Y a Harry se le ocurrirá cualquier vieja excusa para tratar de seguir
poniendo más bebés en mi vientre.

Ha llegado a ser un padre con un amor natural y talento que mi
propio padre nunca tuvo. Solo me hace admirarlo más por ver cuánto
ama a sus hijos.

Y fiel a su palabra, nunca me ha dejado desde ese día de Navidad
en que regresó a mí. Ni siquiera se irá por una sola noche, porque no
soporta la idea de que yo no esté en la cama junto a él.

Cuando arrastra el árbol de estilo Charlie Brown más triste que he
visto, no puedo evitar darle una sonrisa tonta. Él también hizo de eso
una tradición. Consiguiendo el árbol más feo de todos cada año para que
los niños lo decoren el día de Navidad, además del perfecto que la señora
Styles siempre tiene.

Los mantiene ocupados durante toda una hora, mientras los
adultos hablan, así que definitivamente no hay ninguna queja por esa
parte.

—Señora Styles —me llama mientras inclina su cabeza a un lado,
gesticulando hacia el pasillo—. ¿Podemos tener unas palabras?

Lo sigo por el pasillo, me lleva al dormitorio de su infancia, y cierra
la puerta por detrás de nosotros como si todavía fuéramos adolescentes
preocupados por ser pillados.

—Los niños estarán ocupados por un tiempo —dice—. Así que
estaba pensando…

—¿Sí? —Le sonrío.

—¿Quieres hacerlo?

—¿Con Harry Styles? —Le digo exageradamente mientras miro
alrededor de su vieja habitación con los ojos muy abiertos. Luego vuelvo
la cara hacia él y sonrío—. Siempre.

FIN

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El Lunes les traeré otra, besos, estrellitas✨