Ahora tócame tú

Capitulo 2: Atracción

Como se nota que llevo años sin estar en este tipo de eventos. No me puedo creer que nunca haya visto a este hombre.

Seguro mi hermana si lo conoce, pero me extraña que no me lo haya contado, ella me lo suele contar todo...

Lo miro fascinada, veo como se pasa una mano por el pelo y mira hacia el público con la cara llena de seriedad, no emite ninguna emoción, nada. Empieza a hablar y observo que es un hombre poderoso, seguro de sí mismo, y por su manera de comunicarles a las personas presentes sobre el tema del laboratorio,me doy cuenta de que su capacidad de influencia es inmensa. Las personas lo escuchan atentamente sin perderse detalles del discurso. En cambio, yo sólo puedo mirar sus labios, esos ojos que no expresan nada pero que te cautivan, y su cuerpo esbelto y varoníl que me fascina.

Después de unos minutos acaba con el discurso y baja las escaleras del escenario moviéndose de manera impecable veo que se acerca a la mesa de sus padres y se ponen a hablar, lo sigo todo el rato con la mirada sin poder evitarlo y por fín lo veo esbozar una sonrisa cuando su hermana Charlotte le da un beso sonoro en la mejilla, se nota que la quiere mucho. Por lo que veo Charlotte es una joven preciosa, su apariencia dejaría fascinado a cualquier hombre. Tiene el cuerpo digno de una modelo, bronceado y delgadito, su rostro es perfecto, su cabello es moreno, muy voluminoso y sus mechones caen en hondas hasta las caderas. No consigo ver más desde dónde estoy pero estoy segura de que no presenta ningún defecto. Sigo mirando hacia ellos con mucha atención hasta que veo que el misterioso James me echa una mirada seria y es entonces cuando me percato de que no soy una persona demasiado disimulada cuando se trata de una cosa que me intriga.

Me doy la vuelta hacia mi madre y prestando atención a su conversación con mi amiga escucho que están hablando de James Darwin.

- Tienes mucha razón Rita. James es un hombre muy seguro de sí mismo y muy guapo.

- Si señora, la verdad es que un hombre igual que él, sin defectos, es difícil de encontrar.

- A Sam le haría falta un hombre así, decidido, poderoso, que la proteja.

- Gracias mamá, pero yo me sé proteger sola sin la ayuda de ningún hombre.

- Ya lo sé hija, pero nunca está mal tener a alguien que esté siempre a tu lado.

- Esta bien, dejemos esta conversación, no quiero hablar de hombres en una gala benéfica. Cuéntame un poco cual es el verdadero objetivo de este laboratorio.

- Pues...

Mi madre comenzó a hablarme sobre el objetivo de la gala, pero lo único que veía era su boca moviéndose. No era capaz de prestar atención a lo que ella decía, no podía sacarme de la cabeza esa cara, ese cuerpo, ese hombre.

Que demonios me pasa? Esta no soy yo. No, estoy muy convencida de que no soy yo.

Yo no tengo tiempo para hombres. Me tengo que concentrar en mi carrera, en mi vida y en mi persona. Un hombre solo es bueno para una noche loca pero no para toda la vida, los hombres de toda la vida lo único que hacen es estropear lo bueno.