-¡Estás loca ____!
Me alejé el teléfono del oído.
-Zoe en serio que me vas a reventar un tímpano algún día-les conté a mis amigos lo que había pasado éstos últimos años.
-Zoe tiene razón pequeña...
-Gracias Step, amiga estuviste triste todo este tiempo, bueno gracias por eso nos conocemos, pero no es justo lo que te hizo y hace...
-Zoe él no sabía lo que sentía...
-Como sea, no puede estar cogiendo primero a la hermana mayor y luego a la menor.
-Zoe-gritamos Step y yo, creo que tiene razón.
-No me esta cogiendo-me defendí.
-______ solo nos preocupamos por ti, no queremos que te lastime-dijo Step.
-Bueno si eso te regresa a Italia...
-Zoe- grité yo, Step rió.
-¿Como se encuentra tu madre? -preguntó mi amiga.
-Por ahora esta bien, papá me dijo que no se tiene que alterar ¿Ustedes como están?
Hablamos de todos lo que estaba haciendo mientras no nos veíamos y estábamos lejos, quedamos que si yo no voy para allá ellos vendrán, estuve en el teléfono hasta que me quedé dormida.
Bajé a desayunar, estaban mis padres, mamá tomando té y mi papá con el periódico.
-Buenos días hija-me dijo mi papá sin bajar el periódico.
-Buenos días-, me sirvieron el desayuno, fruta, jugo y un wrap de atún.
-Hija acuérdate que hoy es la fiesta de jardín-habló mi madre.
-Paso-dije tomando mi juego.
-Hija, debes de ir, estos años que estuviste fuera no asististe.
-Pero... Ma no tengo nada que ponerme, ni modo no puedo ir, ya es tarde-mi padre rió y yo metí un pedazo de wrap a mi boca.
-Tonterías, ya compré tu vestido, hace mucho que no ves a tu amigas...
-Ma casi no tengo amigas aquí, además las únicas chicas que van, son las que quieren buscar un esposo...
-Pues deberías juntarte con ellas, para que vayas viendo los candidatos.
-Rebecca-habló mi padre.
-Pues a mi no me interesa buscar un esposo, además no me pienso juntar con esas tipas que parecen sacadas de Hollywood bolevard...
-_____-me dijo mi padre.
-Pues entonces no te juntes con ellas-dijo mi madre- pero nos vas a acompañar, tu madre te va a buscar un buen esposo.
-Mamá
-Rebecca-dijo mi padre al mismo tiempo que yo.
-No estoy diciendo que te cases mañana, pero si Dios me da la oportunidad quiero dejar a mi hija en las manos de un buen esposo.
-Mamá-suspiré- esta bien voy a ir- no podía pelear con mi mamá cuando esta enferma del corazón.
Terminé de desayunar, saqué lo que me voy a poner y me metí a la ducha, me cambié me arreglé mis chinos necios y me pinté lo mas natural, casi no me gusta pintarme, bajé y ya me estaban esperando muy arreglados.
Llegamos a el lugar que era a las afueras de Londres, había un señor de traje que nos guió hasta nuestra mesa, ahí estaban los Payne, oh no, desde la otra vez no he hablado con Liam.
Nuestros padres empezaron a hablar y yo conversaba con Nicola me contaba que Ruth ya se iba a casar.
-Por dios estas chicas si que ya han bajado de nivel-dijo Karen-parece que se les quedó la otra parte del vestido en su casa.
-Ya ves mamá te dije, mira esa-todos voltearon, una chica que traía un vestido demasiado corto que hasta se le veía el hilo de la tanga.
-¿Dónde estabas hijo?-volteé y venia Liam con la corbata algo suelta.
-Con Sophia -dijo Ruth que venía atrás de el con un señor.
-Hay Liam-negó con la cabeza su mamá.
-¿Quién es Sophia?-le susurré a Nicola.
-Una chica que quiere amarrar a Liam, una de sus amantes, se conocían desde la universidad-¿una? Pues cuantas habrá, creo que mis amigos tienen razón creo que es mejor no abrirle mi corazón a Liam-mira es ella no la pude ver bien, pero se estaba arreglando el vestido.
-Hola enana-me saludó Liam mientras se sentaba entre su hermana y yo lo miré.
-Límpiate el labial del cuello.
-Disculpe señor Meyer ¿Me permite bailar con su hermosa hija?