𝙤𝙣𝙚-𝙨𝙝𝙤𝙩𝙨 || ᴊꜱʜᴋ

𝓗𝓾𝓶𝓪𝓷 𝓼𝓱𝓲𝓮𝓵𝓭

【Mitsuba Sousuke - Fluff】
Requested by: Mimi-Chan01

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Una niña había golpeado a uno de esos desalmados mocosos con su libro de pasta más dura, y se enfrentaba a otros dos con el ceño fruncido y los labios haciendo un puchero enfurecido.

— ¡¿Estás loca, acaso?! — el mejor amigo del golpeado se acercó para asegurarse que el golpe no era muy grave, y la niña golpeó el suelo con su pie demandando la atención.

— ¡Ustedes se atrevieron a molestar a este chico! — detrás de ella estaba un pequeño Mitsuba, casi llorando y mirando todo con confusión. Aquella chica era pequeña, cualquiera podría empujarla un poquito y fácilmente tirarla al piso por su apariencia frágil. Y debido a eso, la escena era rara.

Los tres chicos conocían a esa niña, sus mejillas naturalmente rojas le daban aquella apariencia adorable que derretía los corazones de todos, y la hacía popular entre los estudiantes por ser como una "mascota", que en ese momento había sacado las garras.

— ¿Y bien? — la única fémina en el salón de clases se cruzó de brazos elevando una ceja — Mitsuba-kun exige una disculpa.

Los tres bullys se miraron entre sí, no estaban dispuestos a golpear a una niña, tampoco iban a quedar mal frente a la menor, por lo que el chico que fue golpeado se levantó con su mano en su mejilla dañada y les dio la espalda a todos saliendo del salón. Sus amigos no tardaron en seguirlo luego de dar una incómoda despedida con una reverencia.

Estando solos, la chica volteó para verificar que Mitsuba no estubiera herido.

— ¿Por qué lo hiciste? — las lágrimas que el chico de apariencia delicada enternecieron a la chica. De uno de sus bolsillos sacó un pañuelo para que se limpiara.

— Eres demasiado lindo como para permitir que alguien te haga daño.

El rostro bonito del chico era arreglado por la contraria, sonreía al no ver heridas graves en su piel. Suspiró aliviada en ese momento y tomó las manos de Mitsuba para ayudarlo a levantarse y llevarlo a la enfermería.

Sus manos estaban unidas para guiarlo, y el peli-rosa no entendía su razón de apegarse tanto a la suave piel de su compañera, mucho menos su presencia. Una niña tranquila, con notas medianamente buenas y que era querida por profesores y alumnos, ¿metida en medio de una pelea? Si era cierto que la menor odiaba la violencia en general, nunca nadie podría imaginarla a ella golpeando a alguien con un libro. Eran de esas cosas que debías verlas para creerlas.

— Mi mamá no está ahora, pero puedo desinfectar tus raspones — la (C/C) llegó a la posición del mayor con alcohol, algodón y unas vanditas, pidiendo que él se sentara para atenderlo.

Mitsuba hacía el esfuerzo de no mostrar que le ardía el contacto con el líquido, cerraba sus ojos fuertemente durante cortos lapsos de tiempo en los que ____ trataba con cuidado cada parte dañada.

— ¿No deberías decirle a los maestros que esos tres bobos te molestan? — la pregunta asustó a Mitsuba de sobremanera, casi suelta un grito por el algodón húmedo que tocó su piel roja — ¿Te da miedo lo que te puedan hacerte después?

El chico no buscaba responder, incluso alejó su mirada de su compañera que parecía estudiarlo con la mirada, esperando por algo, y el silencio los incómodo a ambos.
Cuando cada herida estuvo tratada ambos se levantaron de sus asientos, el peli-rosa iba a apresurar su huída hasta que ____ alcanzó su brazo.

— Yo puedo protegerte, si me dejas, puedo ayudarte con esos idiotas. Seremos tu y yo contra el mundo.

— N-no es necesario...