48.

730 103 4
                                    


—¿Cómo alguien cómo tú, pudo enamorarse de una Roca sin emociones como el ruso?

—No lo sé... Solo pasó.

En realidad, no solo pasó, fue algo tan impactante para él como lo fue para los demás.

Porque un día vio la suave línea curvada que era la sonrisa de Rusia y al otro se fijó en la luz de esos ojos juveniles que le preguntaban por sus secretos.

—¿Qué miras, Canadá?

—Tu alma.

—No tengo algo como eso.

—La tienes.

Sonrió antes de acercarse y señalar la mejilla de Rusia.

—En el pequeño hoyuelo que se nota cuando estás feliz pero no quieres sonreír.

—Estás muy loco —sonrió antes de negar.

Indispensable [Canadá x Rusia]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora