Rick"Esta bien, no es nada solo sigue caminando"
El ardor en mi rodilla era punzante y continuo pero nada de que preocuparse, lo que ahora me preocupaba era un par de sombras que me seguían por detrás, me repetía a mi mismo que no era nada de que alterarse pero cuando una empezó a correr hacía mi, tiré la bicicleta y empecé la huida como si de eso dependiera mi vida, pero fue demasiado tarde, solo corrí unos cuantos metros hasta que sentí un cuerpo gigante golpearme la espalda, caí amortiguando la caída con mis manos y rodillas, gruñí un poco al sentir que la herida volvía a abrirse.
- No entiendes lo que significa mantenerse al margen Ricardo
Esa voz, que espanto.
- Que quieres Alex- intenté pararme pero un pie se apoyó en mi espalda, la empujó haciendo que todo mi cuerpo se desmoronara en la calle y mi rostro se quemara por el roce.
- Aléjate de Roma, su final no será muy diferente al de Natalie te lo aseguro, solo lo estás haciendo más largo y doloroso.
- Cállate el hocico
Enterró su zapato en mi columna, podría jurar que levantó el otro pie para que todo su peso estuviera encima mío. Pero no iba a gritar, nunca le iba a dar esa satisfacción.
- Encontré algo interesante Evans.
Una voz femenina muy conocida, tal vez si hubiera aceptado ir a tomar algo con ella este desastre no hubiera empezado, tal vez. Pude girar un poco mi cuello para mirar un par de tacones de aguja alado mío.
- ¿Te gusta la fotografía entonces primito?
La cámara, las fotos, al tirar mi bicicleta se me olvidó tomar mi mochila, empecé a removerme como un gusano pero lo único que logré es que el tacón de Talia se clavara alado del pie de Alex, enterrándose con demasiada fuerza y satisfacción. Gruñí un poco, pero no iba a gritar.
- ¿Sabes Rick? Si tu amiguita no hubiera interrumpido nuestra charla, nunca hubiera sucedido esto, pero a la niña ya se le está subiendo el ego, y tu eres el culpable de ello - decía mientras enterraba más su punta filosa en mi piel.
- ¿No necesitamos más personas sobresalientes en el colegio me entiendes Rick? - se agachó Alex para susurrarme en el oído, con su voz ronca y maliciosa- Y si tu vas ahí como hada madrina ayudando al que lo necesita y volviendo de carácter fuerte a todo mundo, no quedará un espacio importante para nosotros entiendes, y yo siempre soy importante.
- Estás estupido y mimado maldito sádico.
- ¡Eso es todo lo que tengo! - me gritó subiendo su pie a mis pulmones y presionando más fuerte, tenía el poder para asfixiarme si no hubiera sido que a los segundos se tranquilizó y recobró la cordura otra vez plantándose encima mío - eso es todo lo que deseo.
- Pero mira que encontré - moví el cuello lo más que pude soportar, la cámara, Talia tenía entre sus manos la cámara y miraba algo dentro de ella con un rostro que sugería tenía un plan de venganza.
- ¡Quien lo diría! tu mismo te volviste la perdición de tu amiguita - dijo Alex una vez que Talia le entregó la cámara y él miró las fotos - ya sabes que hacer bonita.
Le regreso la cámara y ella se fue caminando a donde yo supongo había un auto o algo, esos tacones no le permitirían caminar mucho, muy lentamente mi primo levanto el pie de mi espalda, reaccioné al segundo y me paré de golpe, preparando y cerrando mis puños para golpear si era necesario.
- Yo no haría eso si fuera tu, sabes, no solo las fotos pueden ser publicadas, tal vez también algún secretito cuya persona haya trabajado tanto en ocultar
ESTÁS LEYENDO
Tan real como en cuento de hadas
Teen FictionEste es el caso de Roma Cazares, una adolescente invisible y cómoda en su soledad, ella nunca en su vida hubiera imaginado que rescatar a un chico de los policías la llevaría por fin a estar en paz consigo misma, y resolver uno que otro misterio de...