¡Estoy en otro mundo! (Versión antigua)

193 - Juicio por ser un mujeriego I

Antes de volver recogimos a uno de los sujetos que sobrevivieron, los otros fueron asesinados por Flor y Jia.

Luego tuvimos que esperar en la secta un par de horas antes de que los ejércitos volvieran.

¡Un éxito! Todas las sextas fueron erradicadas.

No hubo ni una baja y obtuvimos bastantes recursos, algunas hierbas raras y materiales para armas, las técnicas y eso eran inútiles para todos.

No hubo una completa matanza, pero se asesinó por lo menos al 90% de cada secta, por no hablar de la gente de otra secta que fue a apoyarlas.

Dejando de lado eso... También aparecieron unos sujetos extraños en cada secta, no tan fuerte como al que enfrentamos, pero si como al trio.

Claramente esos sujetos fueron asesinados, se suicidaron apenas intentaron capturarlos.

Por si las dudas, le arranque los dientes y lisie el cultivo del sujeto que capturamos, también paralice sus extremidades por si las dudas.

El interrogatorio fue simple, más aún cuando saque mi maletín llenos de divertidos instrumentos médicos, practique mis habilidades de tortura con él.

Aunque creo que se me paso la mano, tuvo convulsiones y ataques de pánico, intento romperse el cráneo, el cuello y morderse la lengua (Estúpido ya que le arranque los dietes).

Él es discípulo del sujeto que mate... Uno de los 9 príncipes infernales de una secta llamada, la secta del infierno celestial... Un nombre bastante contradictorio.

Sacamos toda la información que pudimos de él, ese es el nombre de esa misteriosa secta que aterro a todas las sectas, esa de la que me hablo Liu Bai hace unos meses.

Esta secta está vinculada al imperio divino...

Esto cada vez se vuelve peor, está el imperio divino, por un lado, el cual ya es un enemigo formidable, pero también está la milicia celeste, la orden de los héroes, la secta del infierno celestial y decena de reinos y sectas... ¡Es un maldito infierno!

Pero es un avance en lo que respecta a la inteligencia, esa secta es la que apoya al príncipe Fo, me cerciore con las memorias de Mei Feng.

Todos sentimos esa misteriosa presión cuando descubrimos a nuestros nuevos enemigos, pero en vez de asustarse, todos estaban aún más motivados, ya eligieron seguirme, ya eligieron este camino y no darán marcha atrás, solo les queda ir hasta el final.

Los generales me pidieron permiso para intensificar el entrenamiento y discutieron con Donovan para aumentar el presupuesto del ejército, construcción divina y tecnología solicitaron mi permito para comenzar con armas experimentales, algo que acepte con la condición de que se hiciera en un ambiente controlado y no se sacara del edificio, lo último que necesito es que tecnología peligrosa se filtre.

Mejorar la secta se hizo prioridad, eso está claro.

Recompensamos a los soldados con 10 mil shin cada uno (Li Mo y Donovan casi se desmayan) y deje arreglado un celebración.

A mí las chicas me arrastraron a mi habitación para que descansara, estoy bien, pero muy cansado.

Roxanne y Flor me hicieron recostarme en ellas mientras me masajeaban hombros, Naomi y Ren me masajearon los brazos, Ren y Nori las piernas, Lisa me daba de comer fruta cortada y Jia comenzó a tocar una citara, tocando una hermosa canción muy tranquilizante...

No pude evitar sentirme avergonzado, no muevo ni un musculo mientras ellas me están tratando mejor que a un emperador... Me encanta, pero me avergüenza.