[1 hora]

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El Dj del capítulo anterior manda sus disculpas por haber arruinado el momento xD

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[Halloween y Día de Muertos 1/3]

Las exploraciones urbanas se hacen cada vez más comunes en la actualidad. Día tras día, los jóvenes optan por salir de su rutina y adentrarse a nuevas aventuras; yendo a lugares desolados, construcciones extrañas o sitios que se rumorean poseen una extraña actividad o energía negativa. Lo que no saben es que esos lugares tienen un trasfondo más abstracto de lo que parece.

A muchas personas no les gusta la idea de adentrarse en un sitio que se califica como "paranormal", ya sea por temor o escepticismo. Y a otras les encanta y lo hacen sólo por molestar a sus amigos...

—Suficiente hice con venir. Yo de la entrada no me estoy moviendo—

—Si vas a estar de bebé llorón Wilde, ¿para que vienes?— preguntó Jack Savage reprimiendo una malévola sonrisa mientras se colocaba guantes quirúrgicos.

A Jack y Bolt se les había ocurrido ir en semana de Halloween a una casa que se rumoreaba estaba maldita, sólo por mera curiosidad y ver si ocurría algo extraño.

La propiedad estaba en las afueras de la ciudad y aunque al principio irían sólo ellos, luego terminaron llevando (a la fuerza) a Nick junto con ellos.

Aunque el pelinaranja presumiera de valiente y desinteresado, en el fondo era realmente miedoso.

Nick río sarcásticamente.
—Ah, no lo sé— empezó —¡Preguntale al desgraciado que me obligó!— exclamó dramáticamente señalando al peliblanco que también se colocaba guantes.

—Te salvé de aburrirte toda la tarde— se defendió Bolt indignado— se dice gracias — dijo entre dientes.

— Y si termino poseído tu tendrás la culpa — escupió Nick con ironía.

—¿Y si dejan de pelearse? — interrumpió el más bajo— Sólo estaremos una hora acá, nadie terminará poseído. Por algo traemos guantes— levantó sus manos agitándolas con obviedad.

—Estarán —dijo el ojiverde cruzándose de brazos— yo de aquí no me muevo.

—Como quieras— rodó los ojos Jack mientras ajustaba el cronómetro en su reloj de muñeca.

—¿De verdad vas a quedarte parado tú solo por una hora? — cuestionó el peliblanco tratando de no reírse.

Nick abrió la boca para decir algo, pero finalmente no dijo nada. Bufó derrotado y se alejó de la puerta, adentrándose más en la casa y dejando atrás a sus amigos.

—¿Cuánto crees que aguante?— preguntó el peligris una vez configuró su reloj.

—¿Deberíamos apostar?— ambos se rieron y fueran tras Nick que ya les sacaba una buena distancia.

Los minutos pasaban y nada parecía fuera del lugar, todo abandonado, polvoriento y antiguo. Los años habían sido crueles en ese lugar, que parecía atascado en un umbral de decepción y soledad.

Hasta el momento no habían encontrado nada que calificara como "anormal" ni muñecas, ni cuadros perturbadores, ni ninguna inscripción con sangre en las paredes. Sólo polvo y más polvo.

Empezaban a perder las esperanzas de encontrar algo interesante, además de que la casa era demasiado grande como para recorrerla por completo. El trato era una hora, y por alguna razón no querían romper ese acuerdo.

Las desventuras de Bolt y MittensDonde viven las historias. Descúbrelo ahora