Al Día Siguiente

Contratiempos...

Ella esperaba impaciente y nerviosa. De un momento al otro, sintió que alguien la cogía de la cintura y ell se giró para besarlo, pensando que era Alex, pero no. Era José quien la rodeaba por la cintura. Cuando vió su cara, se detuvo. José extrañado le dijo:

-¿Qué haces aquí?

Yessica no saber que decir. Para rematarlo, apareció Alex. Vió como José la cogía de la cintura y sin pensarlo, se hacercó rápidamente y furioso:

-¿Quién es este?

Segundos después, José preguntó lo mismo. Yessica, ya no podía aguantar más y se fue corriendo y a la misma vez llorando.

Sus amigas estaban en una heladería cercana y justo cuando iban a pedir el helado, la vieron corriendo. Decidieron ir tras ella. La encontraron en un callejón. Estaba desconsolada. Las tres se fueron a casa. Cuando llegaron a casa de Yessica, las chicas se despidieron y se fueron.

Cuando Yessica entró en casa, vió a José y a sus padres juntos. José les contó a sus padres que la encontró sola y un tío raro que no conocía de nada se acercó furioso cuando la cogía de la cintura. Ese tío sabí au nombre y la verdad, jamás en la vida lo había visto. Yessica confesó que Alex, el chico que le salvó la vida. Sus padres estaban espantosamente furiosos, ahora sí que la vigilarían todo el día.

Eran las 11:30 de la noche. Todos estaban durmiendo y ella era la única que estaba despierta. No soportaba la idea de no poder volver a ver nunca más a Alex, así que se fue a dar un paseo. Se dirigió al lugar que más le encantaba del mundo. Ella pensaba que nadie lo había descubierto aún porque nunca, nunca encontraba ni una sola alma. Llevó su libro, al que escribía todo lo que le pasaba. Antes de entrar, vigiló que nadie la viera. Ese misterioso lugar estaba oculto en el bosque, entre unos enormes arbustos. Cuando entró, se sintió como en casa, una casa que jamás tuvo, un hogar sin problemas en el que era libre de hacer lo que le apeteciera. Allí, había un enorne árbol e el que ella se sentaba para leer o escribir. Había un pequeño estanque y encima, un pequeño puente, alrededor del estanque habían flores. El árbol en el que le gustaba sentarse, si lomirabas desde abojo hacia arriba, parecía que estubiera cayendo una hermosa lluvia de hojas. Era maravilloso ese esplendido paisaje.

Eran las 11:50 pm. Yessica estaba sentada al costado de aquel árbol. Todo era tranquilo. Se sentía la suave melodía de la brisa que chocaba contra las hojas i los arbustos. A lo lejos, se veían unas luces verdes diminutas, era fascinante como las luciernagas se encendían y apagaban cada una, simplemente era fantástico.

(Mientras tanto)

Alex estaba confundido, no sabía quien diablos era ese chico que le cogía de la cintura a Yessica.

Alex estaba con Luís, un chico de la misma edad que Alex, que gracias a Luís, tenía hogar y comida. Resulta que Alex debía 12.500€ a Luís, sinó, Alex se quedaría en la calle y en aquellos tiempos, Alex se metía en muchos lios i la policía lo buscaba. Luís se aprovechó de eso y decidió "darle una oportunidad" para que no le cogieran. Alex se convirtió en la mano derecha de Luís, que dirigía una banda peligrososa, pero con el tiempo se comezaron a llevar bien, e incluso como hermanos o eso era que se decian entre ellos, pero Luís nunca se olvidaba del dinero que Alex le debía.

Alex le contó a Luís aue conoció  una chica fabulosa y que no sabía que tenía un dineral... cuando Luís escuchó la palabra 'dinero', le advirtió a Alex que ya era hora de que le tendría que dar el dinero o sinó le demandaría. Alex no sabía que hacer, Luís le dio una orden:

-Tendrás que robar un collar caro de tu amiguita.

Alex se paralizó. Era eso o perder al amor de su vida...

Decidió irse a pensar un poco sobre la decisión que tomaría así que se fue en busca del lugar que encontró cuando era pequeño. Cuando llegó, sigilosamente se  sentó al costado del único árbol que había y pensó en todo lo que había pasado con Yessica. Le encantaba ese sentimiento de tranquilidad...