Drabbles KSB

Lencería #3

Intrigado, Souichi obedeció. Morinaga ató aquellas manos con la corbata lo suficientemente ajustadas, inmovilizando los brazos de su senpai; Souichi miró aquello confundido y con la mirada exigió una respuesta. Morinaga sonrió coquetamente, bajó del regazo a su senpai y se puso de pie; extendió una mano a Souichi, invitándolo. Confundido, Souichi estiró sus brazos hasta tomar la mano de su ex kohai. Morinaga llevó a su senpai frente al espejo, posicionándose él detrás.

- ¿Mori...? ¡Nggh!-

La pregunta se volvió gemido, ya que Morinaga tiró con brusquedad aquel cabello rubio, dejando expuesta aquella zona erógena que gustoso mordió; su otra mano sujetaba la cadera que lo volvía loco. Dejando un último beso se acercó a la oreja de Souichi.

- Aunque los ligueros se ven exquisitos, me molestan... prefiero tus caderas desnudas... - dicho esto, deshizo los broches de la prensa, los dejó caer al suelo.

Soltando el agarre del cabello de Souichi, Morinaga comenzó un camino de besos en la espalda de su senpai; las manos traviesas de Morinaga se colaron en aquellas bragas, bajándolas para dejar ver el miembro erecto de Souichi, hinchado y necesitado de atención. Mientras tanto, Souichi no quitaba la vista del espejo; era tan erótico necesitaba mirar las acciones de Morinaga. Estaba tan caliente, tan ansioso...

Las bragas no bajaron mucho, su entrepierna comenzaba a doler, presionó una mano en la espalda de Souichi, quería inclinarlo más; Souichi terminó apoyando sus manos atadas en el espejo, dejando aquel trasero a merced de su ex kohai. Extasiado por aquella actitud sumisa, Morinaga buscó rápidamente lubricante, una vez que sus dedos estuvieron resbaladizos, llevó su dedo índice donde solo él tenía acceso, hizo presión y se introdujo de manera lenta; Souichi dejó salir un quejido, estar de pie haciendo eso era extraño. No paso mucho para que un segundo dedo se abriera camino, Morinaga movía sus dedos a manera de relajar aquella entrada.

- ¡AAH! ¡N-ngh! - gimió Souichi. Morinaga había dado con aquella protuberancia intencionalmente; las piernas de Souichi temblaban, él se limitó a apoyarse aún más en el espejo. Morinaga siguió arremetiendo contra la próstata de Souichi, torturándolo a su gusto, un tercer dedo entró. Souichi sentía que sus piernas cederían en cualquier momento.

Los dedos se fueron rápidamente. Souichi trató regular su respiración, aunque quedó inconforme; el sonido de un cinturón desabrochándose rompió el silencio. Morinaga se desabrochó el pantalón, dejó salir un gruñido de satisfacción, se bajó las prendas a manera de solo dejar expuesto su miembro; con su mano se masajeo la entrepierna, dándole un merecido alivio. Cuando dejó de tocarse, y agradecido de ser más alto que su senpai, se inclinó por encima de Souichi, apoyó su mano sobre las de su senpai, dejándolo inmóvil. Sopló en la oreja de su senpai, provocándole un escalofrío.

- ­­No desvíes los ojos del espejo, quiero que veas tu cara cuando te penetre. - dijo Morinaga de manera dominante.

Agarrando su miembro, lentamente se hundió en aquella apretada y caliente cavidad. 

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CONTINUARÁ.... eso espero.