~Son mi única familia~

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Pasé como una hora divagando sobre eso y otros temas que fueron pasando por mi mente hasta que el cansancio mental junto al físico pasaron factura y quedé dormido. Pero adivinen qué, en mis sueños aparecieron mis ya compañeras del día a día: las pesadillas.

Todo era extraño y oscuro... estaba en el espacio, habían muertos, un ejército con seres de otro planeta y... los chicos. Las lágrimas se acumulaban en mis ojos y veía todo con terror. Hulk estaba muerto con flechas y lanzas atravesando su cuerpo, Natasha tirada en el suelo con la cabeza sangrando y ojos abiertos pero sin vida, Clint con el arco aun en manos muerto, Thor tirado con el mjolnir a su lado y Steve. Este último tenía esperanzas de que siga vivo, necesitaba que siga vivo, así que corrí a él para comprobar su pulso. Al acercarme abrió los ojos y con su último suspiro dijo esa frase grabada a fuego en mi mente:

"Pudiste salvarn..." y antes de siquiera terminar la frase, la vida se fue de sus ojos azules para quedar solo dos orbes sin vida y muertos viéndome. Entonces la tortura seguía y en mi mente susurros con su voz diciendo "¿por qué no hiciste más?" Se reproducían sin parar reprochando lo mal héroe que era... lo mal amigo que fui al no salvarlos, al no salvar a mi familia.

Luego levantaba la vista y esas tropas avanzaban a la Tierra donde quedaban seres humanos que contaban con sus héroes para sobrevivir. Pero lo que no sabían es que esos héroes que los salvarían no pudieron salvarse a ellos mismos y el último en pie estaba por colapsar impotente.

Entonces todo se derrumbaba, lágrimas de dolor, ira, impotencia y culpa rodaban por mis ojos mientras caía al piso gritando por ellos. Mis amigos, mi familia había muerto por no haber hecho más, ellos tenían que vivir, yo tendría que haber muerto, solo yo. Mi garganta ardía por los gritos y el aire se escapaba de mis pulmones. Quería morir con ellos, no merecía seguir vivo, ellos sí. Agarraba cosas filosas que habían a mi alrededor pero nada servía, se esfumaban de mis manos antes de siquiera poder tocar mi piel y la impotencia crecía. Necesitaba que todo termine, que todo eso acabe.

Una voz lejana comenzaba a acercarse pero me removia intentando alejarme de ella. La realidad comenzaba a hacerse presente hasta que logré despertar del sueño con los ojos rojos y lágrimas aún cayendo de ellos. El sudoro empapaba mi rostro y cuerpo pero aún así unos brazos me abrazaban  y contenían.

- Tony, estamos bien, estoy bien, estás bien. Fue solo un sueño, por favor no llores. No estás solo, no nos pasó nada, no es tu culpa. Aquí estoy.-

Al reconocer a Steve salté a sus brazos y me aferré a su pecho hundiendo mi rostro en su cuello.

- Lo siento, lo siento, lo siento, yo de-debí, debí hacer más, lo siento.- Dije entre hipidos.

- Hey, está bien. Fue solo un sueño, no tienes que disculparte.-

Sus brazos me abrazaban con fuerza conteniendome sin querer soltarme. Daba algunos besos en mi cabeza y sus manos acariciaban mi espalda aún herida. Mis brazos tampoco querían soltarlo, temía que esto sea solo un sueño y lo anterior haya sido la realidad. No quería que se esfumara, no quería que se fuera.

Entonces hizo una maniobra donde él terminó apoyado sobre el respaldo de la cama y yo sentado sobre su regazo a horcajadas. Me negaba a soltarlo así que seguimos abrazados mientras mis sollozos seguían. Ahora él pasaba sus manos por toda mi espalda dejando caricias intentando calmarme.

Minutos más tarde logré dejar de llorar y solo me aferraba a él esperando que no desaparezca.

-... por favor, dime que estás aquí y no es un sueño.- Dije en un susurro.

- Estoy aquí.- Dejó un beso en mi sien.- No es un sueño.-

Mis hombros se relajaron al oír eso y me acurruqué más en su cuello.

-... gracias.-

- Está bien.- Me atrajo más a su cuerpo y continuó con las caricias.

-... creí que estaban muertos, que estabas muerto, todos lo estaban y yo no podía hacerlo, quería morir con ustedes y no podía.- Un sollozo se me escapó junto a otra lágrima. Su mano levantó mi rostro y con unos besos sacó las lágrimas de mis mejillas.

- Puedo asegurarte que no estamos muertos y tú tampoco lo estarás.-

Una lágrima de alivio salió de mis ojos y me abracé a su cuello mientras él me abrazaba por la cintura.

-... a eso me refería el otro día con respecto a las pesadillas de Wanda.- Se quedó en silencio esperando que siga hablando pero aún haciendo caricias.- ¿Recuerdas aquella misión donde recuperamos el cetro de Loki?.- Recibí un asentimiento de su parte.- Cuando estaba por tomar el cetro, apareció Wanda y me mostró aquella pesadilla. Estábamos en el espacio y todos ustedes estaban muertos menos yo y un ejército se dirigía a la Tierra sin que yo pudiese hacer nada... por eso creé a Ultrón. Solo quería protegerlos e hice todo los contrario, los puse en peligro y mucha gente murió por mi culpa.- No podía decir las palabras sin lágrimas de por medio empapando su camiseta.

Esperaba algún reproche por haber sido tan susceptible pero lo único que recibí fue un beso en la nuca y sus caricias en mi espalda quemada.

-... siempre intento ponerlos a salvo, intento mejorar sus armas y efectividad aunque no lo noten. Digo que es mi deber como Vengador pero lo hago más por mi paz mental que otra cosa. Son mi única familia además de Rhodey, no quiero perderlos. Por eso ahora tengo estas quemaduras en la espalda y herida en el hombro. No los iba a dejar solos en eso, prefería morir ayudándolos y tampoco iba a dejar que le pase a algo a Clint. Los quiero demasiado a pesar de que ellos me odien.-

- Eres una buena persona, Tony. Te quiero mucho y sé que ellos también lo hacen pero por ahora están resentidos. Tú también eres nuestra familia, no te dejaríamos así de fácil y tampoco te odiamos. Estamos aquí para ti, estoy aquí para ti.-

-... gracias, eres demasiado bueno conmigo a pesar de la basura de persona que soy.-

Levantó mi rostro y dijo:

- Creí haberte dicho que no eres ninguna basura aquel día. Definitivamente no lo eres,- Posó su mano en mi mejilla.- no te consideres como tal. Si tu fueses una basura, el resto del mundo sería una cloaca o un basural entero.- Una sonrisa salió de mis labios ante esa estupidez.- Lo digo en serio, eres una buena persona, de las mejores que conozco.-

-... gracias.-

- Creo que es hora de dormir. Necesitas descansar, pasaste por mucho en poco tiempo.- Me aferré a su cuello de nuevo.

- No quiero dormir, no quiero más pesadillas. Quiero encerrarme en el taller y que el mundo desaparezca junto a mi conciencia.-

- Por más que lo rueges, aún tiene que hacer reposo. Dormiré contigo así si tienes pesadillas, te cuido.-

- Pero...-

- Pero, nada. Vamos a dormir.-

Nos volvió a acomodar en la cama y él entró conmigo. Yo dormí aferrado a su pecho y el abrazándome. Esa noche no tuve más pesadillas.

~♡~

Holii,

Ay, este capítulo me puso triste al escribirlo pero a la vez me gustó, no sé a ustedes. Solo voy a decir que dentro de poco se va a descontrolar la cosa. Pero yo les aviso cuando sea momento de entrar en pánico, ¿okey? Jsjsjjsjs.

Bueno, espero que les esté gustando y gracias por el apoyo.

Los quiero, bye <3.

~Azul~ Stony Donde viven las historias. Descúbrelo ahora