Había un pedote con prensa y todo porque habían agredido a una alumna en la escuela. Salíamos temprano e íbamos a beber. Mientras íbamos caminando, teníamos que cruzar un puente. En este, había un grupo de personas encapuchados con trajes de mariachi, aparentemente pidiendo limosna. En cuanto los rebasábamos sacaron una pistola y nos quisieron asaltar. Nosotros corrimos con todo y cartón de cervezas. Estábamos justo terminando en puente, bajando las escaleras. Ulises y yo queríamos huir, pero nuestros amigos nos dijeron que no lo hiciéramos porque se iban a emputar los asaltantes si nos veían. Al final todos huíamos y tomábamos diferentes rumbos hasta que nos juntábamos sin querer y por el ruido que hacíamos, nos descubrían. Empezaban a perseguirnos. Algunos de nosotros llegamos a una primaria y ahí, los asaltantes también empezaron a meterse con los niños. Ulises se fue a los honores a la bandera y yo me iba a por otro lado. Me metía a un salón con dos niñas y una señora. Me metía abajo de un banquito y me hacía la dormida. Uno de esos vatos entraba con una pistola y tenía una riña con una de las niñas con todo y pistola. Yo los veía hacia arriba, estando tumbada en el sueño, él no notó mi presencia. No recuerdo que le decía el asaltante pero la niña no se dejaba y luego se la llevaba. No les hacía nada a la otra niña y a la señora, pero ambas querían ir a rescatar a la otra niña que se llevó.