Estaba en la primaria, entraba a la escuela y estaba Yanely jugando con sus amigos. Subían las escaleras y unos morros le subían la falda. Yo quería aventarles mi lapicera para golpearlos, pero lo deje pasar (en parte por mi mala puntería) . Hasta que estando arriba, le empezaban a meter cosas en orificios muy muy privados y yo la defendía y los golpeaba. Ella terminaba llorando, unas niñas y yo la acompañábamos e intentábamos consolarla. Le decíamos que los acusara en la dirección, pero ella solo quería irse a su casa, sin acusarlos.