Estaba en la escuela y hacíamos una dinámica donde teníamos que cambiarnos de lugares que la verdad no recuerdo muy bien. Yo llevaba mi teaser de defensa personal para el regreso de la escuela pero lo dejaba en la banca de una compañera mientras se hacía la actividad. Cuando regresaba por él, mi compañera lo tiraba al suelo y me preocupaba que se hubiese dañado, así que le dije que en un rato más lo probaba para que no me lo quitara la orientadora que justo estaba detrás de mí y me decía que me lo tenía que quitar. La convencía de alguna manera de dejármelo y yo iba al baño. No podía encontrarlo, a cada espacio que creía que era el baño en realidad era un salón. Regresaba a mí propio salón y resultaba que teníamos que exponer.Yo ni si quiera sabía que íbamos a hacer, solo sabía que era una interpretación al estilo de una obra de teatro. Teníamos una marioneta y le preguntaba a Pablo que si esa era mía y él me decía que era suya, que la compartiriamos porque yo no tenía personaje que interpretar y que entonces yo haría las voces más agudas. Yo estaba nerviosa porque era algo que ni si quiera habíamos repasado o mínimo leído.
Había empezado a llover desde un rato antes, sin embargo, hasta ese momento ya era una lluvia muy fuerte. Había un maestro invitado en el salón que estaba al lado de nosotros. Cuando ya iba a iniciar nuestra presentación, dos niñas se levantaron y fueron a mirar por la ventana. La lluvia sobrepasaba las ventanas por sus orificios en los marcos y las llegaba a mojar bastante. La maestra, enojada porque las niñas no se sentaban, dijo que iniciaríamos hasta que a ellas se les antojara. La lluvia era cada vez más fuerte y las ventanas se rompían por dicha fuerza. El maestro invitado nos decía que saliéramos del salón y posteriormente de la escuela porque al parecer era más peligroso quedarnos en las instalaciones porque la lluvia las estaba destruyendo. Íbamos todos en grupos y cuando ya estábamos afuera me di cuenta de que era la única que no llevaba mi mochila. Le decía a una maestra y ella me contestaba que si mi mochila era más valiosa que mi vida. Al despertar tenía un dolor de garganta horrible, creo que la lluvia de mi sueño me hizo daño.
