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—Buenos días, príncipe azul. —Dijo Taehyun, acercándose a Soobin, quién estaba caminando por los pasillos del instituto, llegando a la parte trasera del lugar, como había acordado la noche anterior con Taehyun y Ryujin para encontrarse ahí y darle los obsequios que Soobin le regalaría a Huening kai para conquistarlo.

—No vino Ryujin contigo? —Preguntó Soobin

—No, tuvo que quedarse más tiempo en clase ya que le alargaron la hora.

—Ah, está bien. Trajiste las cosas?

—Los regalos para tu novio? Sí, sí los traje, están en el baúl de mi auto.

—Ya, Taehyun no lo llames mi novio, es un simple maricón—Dijo Soobin haciendo muecas de disgusto. El solo imaginarse a ese chico Hueningkai le daba nauseas.

—Ahora no lo es, pero pronto lo será—Contestó Taehyun en un tono burlón.

—Uh, como sea, ya es la hora, debo hacerlo.—Soobin miró su reloj que indicaba que ya era la hora que Hueningkai cursaba.

—Sip, vamos a buscar los regalos. 

Y ambos se dirigieron al auto de Taehyun para buscar las cosas que había comprado. Soobin estaba un poco nervioso, ni siquiera él entendía como podía ponerle nervioso el simple echo de pedirle que sea su novio a el chico que le ha roto el corazón y lo humilló por ser un enano delgado que se comporta como una mujer. O bueno, eso pensaba casi todo el instituto.

—Mira, este pequeño detalle que ha hecho Ryujin, con esto se volverá loco. —Taehyun le entregó un sobre blanco con decoraciones de corazones rojos con una carta adentro que estaba cerrado. Soobin lo tomó y miró un poco confundido al sobre

—Es acaso una carta de amor? —Taehyun asintió—No, es inútil, qué ridículo.

—Vamos, ya he leído la carta y no es taan humillante, Hueningkai no le tomará importancia y seguramente le encantarán las palabras que Ryujin escribió.

—Tan humillante dijiste? o sea que si me veré humillado?

—E-emm...ya, vete Soobin, se te hará tarde, luego le envías mensaje a Yeonjun y le cuentas todo ya que a mí se me ha roto el celular, está bien?—Dijo Taehyun evitando la pregunta de Soobin.

Sobin bufó—Bien, nos vemos. —Dijo el pelinegro, alejándose de Taehyun sin esperar una respuesta de este.

Taehyun y Ryujin la noche anterior habían comprado los obsequios para ese día en el que Soobin se le declararía a el chico tímido, Hueningkai.

Consistía en un peluche de oso grande, una caja de bombones y un ramo no tan grande de rosas, incluyendo la carta misteriosa la cual Soobin no sabía que decía pero estaba seguro de que era una estupidez. 

Soobin caminaba por los pasillos, buscando el salón de Hueningkai. A cada paso que daba sentía que sus piernas temblaban cada vez más y más, hasta que comprendió que lo que lo ponía nervioso eran las reacciones de los compañeros de curso de Hueningkai, incluyendo a su profesora cuando lo vea declarandose. 

Sí, era eso.

Finalmente llegó a su salón y se detuvo en frente de la puerta, cerró sus ojos y suspiró por unos segundos para luego volver a mirar hacia la puerta. Tomó una postura derecha y puso su rostro serio, finalmente abrió la puerta del salón y se llenó de miradas sobre él. El hecho de que literalmente todos los alumnos que estaban en el salón lo estén mirando con una cara no tan disimulada al ver al ''chico malo'' parado en la puerta. 

Volvió a suspirar y vió que la profesora se asomó a la puerta así que decidió hablar—H-hola...yo quería h-hablar con Hueningkai, si me permite... —Soltó Soobin un poco nervioso.

bet on love ・ sookaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora