Capítulo 12: Chocolate envenenado.

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*** Nota informativa***

Solo quería deciros que este capítulo, al igual que otro anterior, muestra un recuerdo que también aparece en el libro de Harry Potter y el Príncipe Mestizo. Aunque he tratado de cambiarlo un poco, los diálogos y algunas expresiones, hay una escena que es muy parecida y quiero dejar claro que todo el reconocimiento es para la gran J.K. Rowling.

Gracias y disfruten.

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(Narrador: Christine)

Al día siguiente, por la mañana, fui a la biblioteca a leer algún libro. Lo cierto es que no me encontraba bien, de hecho, empecé a pensar que quizás era buena idea que fuera a ver a algún doctor. Sin embargo, Tom apareció justo enfrente mía, haciendo que me sobresaltara, y deduje que mi descanso había concluido.

- ¿Qué haces aquí?- pregunté.- ¿No deberías estar en la tienda?-

- Así es.- respondió.- Pero el señor Burkes me ha pedido que haga una visita a uno de sus mejores clientes y quiero que me acompañes.-

- ¿De quién se trata?- dije dejando el libro sobre la mesa.

- Hepzibah Smith.-

- No Tom, sabes que no soporto a esa mujer.-

- Ya lo sé Christine, pero entiende que la visita a su casa es una oportunidad única.- añadió.- Si los rumores que he oído son ciertos, ella es descendiente de Helga Hufflepuff y, por lo tanto, es muy probable que guarde la reliquia en su casa.-

- ¿Y para qué me necesitas?- quise saber.

- Llegado el caso, mientras yo la distraigo tú deberás robarle la copa.-

Suspiré con desagrado. Lo cierto es que no me apetecía nada la idea de ir a la casa de esa desagradable mujer, pero ni modo, si Tom quería que yo fuera no había mucho más que yo pudiera hacer.

- Está bien, pongámonos en marcha.- dije incorporándome.

- Tendremos que viajar de la manera tradicional Christine.-

- Como digas.-

- Ah, y una cosa más.- indicó.- Tendrás que asegurarte de que la elfa doméstica que vive con ella no dé problemas. Utiliza el hechizo "inmovilus" o algo parecido.-

Me limité a asentir. Después ambos salimos de la habitación. Tendríamos que utilizar la chimenea de polvos flu y luego coger un carruaje hasta la casa de esa mujer.

***

Cuando bajamos del coche de caballos puede ver una casa bastante grande, de dos plantas y con un gran jardín decorado con numerosos artefactos. Cruzamos un camino de piedras hasta llegar a la entrada. Nada más tocar la puerta, una anciana elfa doméstica nos abrió. Se ve que nos estaban esperando.

Ella nos condujo hasta la puerta que daba a un gran salón, aunque tan lleno de cosas que incluso parecía algo agobiante. En el centro, sentada en un sillón se encontraba la señora Smith, con una túnica rosa y un chal de piel. Como siempre, su cara estaba llena maquillaje y su cabello demasiado peinado.

- Buenos días Madame.- saludó Tom.

- Oh Tom, tan puntual como siempre, es tan agra...- cuando se percató de mi presencia se le cambió el rostro.- ¿Qué hace ella aquí?-

- Me temo que el señor Burkes me ha obligado a traerla conmigo pero no se preocupe, ella puede esperar fuera.-

-Sí, será lo mejor.- se apresuró a decir.- ¡Hokey! Acompáñala a la salida y cierra la puerta, no quiero que nos molestéis.-

El Heredero: el Reinado de la Oscuridad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora