El barrio Uchiha resplandecía otra vez.. quise pensar que volvería a sus días de gloria.. un orgulloso clan lleno de personas con increíbles habilidades se volvía a levantar de la penumbra.
Convencer a Sasuke de quedarse fue todo un desafío.. él no aceptó vivir con nosotros pero pasaba la mayor parte del tiempo en nuestra casa.. ellos eran demasiado sobre protectores conmigo y él bebe..
El templo Uchiha estaba decorado de manera exquisita, otra vez se lo debía a mis amigas..
—¿estás lista Sakura?
Mi sensei me llevaba del brazo, él estaba feliz... yo le había pedido que me acompañara en calidad de padre y aceptó encantado.. kakashi sensei era como un padre, siempre me protegió y me cuido.. estuvo conmigo en los peores momentos y me ayudó a ponerme de pie incontables veces.. sentí tristeza por no poder compartir este hermoso día con mis verdaderos padres. Pero se que en algún lugar me miran orgullosos y felices.
—nunca he estado más lista sensei..
Camine junto a él mirando a todos mis amigos.. sus rostros de alegría me hacían sentir fuerte y protegida.. Itachi me regalaba una hermosa sonrisa desde el altar.. tanta calidez, tanto amor desbordaste me consumía.. Kakashi entregó mi mano y le dio una abrazo a mi novio.. yo lo miré a esos hermosos ojos y perdí toda noción del tiempo.
—estás hermosa -dijo el-
Me sonroje mientras lo miraba con ojos llenos de amor y deseo..
—tu luces caliente, Ita-kun..
Entre nosotros siempre eran sonrisas cómplices y caricias leves, no podíamos apartar nuestras manos el uno del otro.. por que cuando nos tocábamos solo por inercia nos sentíamos completos y en paz..
—Itachi—
Ella estaba hermosa, sus ojos verdes resplandecían como el sol.. sus mejillas sonrojadas la hacían lucir preciosa y adorable..
La amaba tanto.. cada segundo que pasaba a su lado hinchaba mi corazón de alegría, Sakura era mi mundo entero.. saber que llevaba mi hijo en su vientre solo aumentaba mi deseo loco por ella.
Bailábamos al atardecer, su suave cuerpo se amoldaba al mío como si fuese una extensión de mío.. quería ser todo lo que ella necesitaba, quería ser el hombre perfecto que le robara las sonrisas.. lo único que esperaba es poder ser un padre amoroso y dedicado, quería darle todo el amor de padre a mis hijos, que ellos crecieran en una familia feliz.. que se sintieran amados y protegidos, por que sé que ella sería perfecta en todos los sentidos..
—¿estás feliz preciosa?
—más que feliz Ita-kun.. tú me haces delirar por tanta felicidad.
Besarla siempre era sublime.. sus labios eran cálidos y dulces, ella desprendía un aroma florar y femenino que calentaba mi alma.
Cuando la fiesta aun estaba en su apogeo yo la tome en brazos y me perdí con ella.. la llevé a casa. "A Casa".. tenía esa sensación de felicidad cuando estaba con ella, de pertenecía y supe que casa, significaba cualquier lugar donde ella estuviera..
Saque su hermoso kimono y me deleite en su suave piel, Sakura siempre me quitaba el aliento.. era tan hermosa y perfecta.
Sus suaves manos me desnudaron y nuestros cuerpos quedaron uno contra el otro..
—te amo tanto Ita-Kun..
—yo también te amo hermosa.. eres mi mundo.
La bese mientras desordenaba su cabello, ella se aferraba a mi cuello y sentí la calidez de su amor por todo mi ser.. alguna vez quise morir, alguna vez quise perderme en la oscuridad.. pero ahora todo lo que pensaba era pasar el resto de mi vida con esa hermosa mujer que me había salvado tantas veces de tantas maneras..
