Aome estaba perpleja al ver al peliplateado gritar su nombre entre sus sueños, pero eso no cambiaba nada en lo que ocurría. Ella siempre se cercioraba de ver que al revisarlo estuviera dormido pero ahora él estaba bien, despierto se encontraba desorientado y al parecer incrédulo.
Inuyasha:Aome...
Sesshomaru: Los dejaré un momento.- informó el mayor de los peliplateados viendo que hacía mal terció, desde un principio sospecho que su hermano solo actuaba pero ya sabia quien era el doctor del tonto de Inuyasha sin embargo, sería mejor seguir callando la otra parte de está historia además que sus padres y él sabían la situación de todo este cuento.
Aome:Disculpe joven pero mi deber como su doctora es ver como va mejorando su salud.- le dijo como sino lo conociera sin más solo siguió con su trabajo, y sí, si estaba nerviosa no podía creer que estuviera en la misma habitación que Inuyasha, pero esta vez con él despierto viéndola con esa hermosa y intensa mirada dorado que sorprendentemente todavía hacía que su corazón latiera con intensidad.
Inuyasha: Aome yo...
Aome:Creó que todo esta bien así que me voy.
Inuyasha: Aome espera necesito hablar contigo.- siendo interrumpido nuevamente por la azabache que piso con fuerza el piso y volvió a verlo de una manera bastante con odio se podría decir, la verdad no la culpaba en parte se lo merecía por no haberla cuidado cuando dijo que lo haría pero como su hermana se lo había dicho las cosas del pasado no las podía cambiar pero si aprender de ellas, y hablando de ella no sabía nada de su hermana desde el día del ataque.
~~~~~~~ En otro lado~~~~~~~
¿?:Sango cariño las niñas ¿sabes en donde están?- se escucho unas risitas en la habitación en la que estaban pero ni rastro de las pequeñas traviesas.
Sango: No cariño, no sé en donde podrían estar.- sonriente vio a su esposo buscar a sus traviesas hijas, pero unos movimientos inquietos llamaron su atención sin embargo no se preocupo al saber de quien exactamente se trataba, al mirar a su pequeño bebe esta estirando sus pequeños brazos hacía su padre.
Jamás se imaginaron que una simple llamada cambiaría su paz y vida feliz y que solo sería el comienzo de lo que sería una serié de desgracias consecutivas. Contestando el llamado Miroku con una sonrisa jovial atendió pero al escuchar la voz de Ella rápidamente se borro para luego dar una cara de asombro y horro.
Miroku:¡Sango son ellos han vuelto a atacar!.- le informó a su mujer y ella lo miro con terror el recordar lo que tuvieron que vivir hace seis años.- y está vez lograron su cometido.
Una exclamación salió sin avisar de su boca al ver que ahora estaban indefensos ante cualquier ataque, pero eso solo quería decir que...
Sango: A lista todo hay que llevar a los niños con los Taisho.- con rapidez se puso de pies tomando con fuerza y delicadeza a su pequeño hijo, residiendo de respuesta de su esposo un asentamiento de confirmando que se encontraba de acuerdo con su decisión.
Era casi imposible lo que pasaba por su cabeza, pero nada en esta vida es imposible y ella más que nadie lo sabía ya que debería estar muerta pero se encuentra con vida, pero ahora que hayan matado a uno de sus mejores agentes no lo encontraba posible y más si era...
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Aún se encontraba en cama algo que le parecía de lo mas aburrido y también le comenzaba a dar hambre pero no se podía quejar ninguna enfermera o enfermero fastidioso había venido a la habitación de eso tal vez se encargaron sus padres que sabían de ese detallé.
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𝓛𝓪 𝓒𝓪𝓷𝓬𝓲𝓸𝓷 𝓺𝓾𝓮 𝓬𝓸𝓶𝓮𝓷𝔃𝓸 𝓷𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸 𝓐𝓶𝓸𝓻 (Pausada )
FanfictionInuyasha Taisho era un niño que iba todos los días al bosque para ver a una niña a escondidas cantar cerca de un lago y de un enorme árbol. Pero un día en su escondite en el árbol el trataba de esconderse cuando se cae del mismo, asustado a la peque...