-¡Júralo!- Chilló Clara emocionada.
-Lo juro, fue tan real... Lo ví, era perfecto, aunque ni siquiera conseguí verle el rostro. -Confieso desepcionada.
-¿Qué ha pasado con el papasito? - Clara siempre tiene que ser la ama y señora del chisme. Aunque tengo que admitir que deseo desesperadamente contárselo.
-Es alegre, tierno, pero- dije alargando la última letra-Me gusta Leo.
-¿Por que no le das una oportunidad, tiene meses insistiendote?- y sí, Santiago llevaba dos meses llevándome flores, chocolates y demás cursilerías, las cuales amo, invitándome a salir y yo no lo veo más que como un amigo, triste pero se encuentra en la friendzone.
-A ver que pasa.-Me límité a responder eso.
14 de febrero. Puro amor y miel por doquier. Y yo me despierto como sí nada, para mi es un día normal. Abro los ojos y me volteo para quedar recostada sobre mi costado derecho ni el mismo Adam Sandler podría animarme en este preciso instante, ahora a tener que aguantar al los tórtolos que estarán acaramelados por cualquier rincón. Miro el reloj, las 7:36 am, estoy a tiempo para el trabajo, me levanto tranquila y me pongo mis pantuflas como sí fuera un reflejo, arrastro mi cuerpo hasta el baño y abro la regadera, me encanta dejar un buen rato el agua corriendo para que el baño se llene de vapor, me quitó la pijama que consta de una pantalonera y una playera, si, la improvise. Meto mi mano al agua caliente y compruebo que este a temperatura exacta. Me baño por 15 minutos y al terminar cierto la llave, y salgo llena de ánimos, y me repito a mi misma mi mantra de cada mañana, "nos va a ir excelente en el trabajo, nadie puede contigo Audrey".
Me pongo mi pantalón de vestir y mi playera polo con el logo de la empresa. Tomo el camión justo a tiempo.
-Buenos días. -Digo al conductor del auto bus. Y el responde con un gesto que yo interpreto como un "igualmente" aunque en realidad no se que significa.
Nunca he sido una chica popular, pero a pesar de ello nunca me ha faltado algún detalle en San Valentín, una vez un niño muy raro del que yo no tenía idea de su existencia me obsequio unas flores, pero una abeja lo siguió, fue divertido, pero este año es diferente, no espero nada, no creo recibir algo en lo absoluto. ¿De quién? ¿De Leo? Y río para mis adentros, como no.
Al llegar al trabajo abrazo, saludo y felicito a mis compañeros.-Audrey, feliz día. -Dice Marco con una gran sonrisa como siempre.
-Feliz San Valentín Mark.
- Hoy veremos los intentos fallidos de tus pretendientes para conquistarte- y yo suelto una carcajada enorme, así de esas donde escupes agua exageradamente si es que estas bebiendo, pero sin agua. Como tengo tantos.
-Que bromista Marco. Deberías ser comediante.-digo con un tono exagerado de sarcasmo. Volteo los ojos.
-¿Vamos a comer?-Dice Clara al entrar por la puerta del lugar. Ya son las 2:04pm y ella esta puntual por mi. Por siempre.
Yo asiento y me dirijo hacia ella. Clara saca una cajita en forma de corazón de su bolso y me lo extiende.
-Feliz día, amiga mía.- dice con una gran sonrisa. ¿Qué? Demonios nunca pensé en Clara, ella me esta dando un obsequio y yo no le tengo nada. Soy la peor amiga del mundo. Definitivamente. Trágame tierra.
-Gracias.-Digo con una gran sonrisa fingida.- Pero sí quieres guárdalo y me lo das ahorita, mi mamá quedo de traerme el tuyo, lo olvidé en casa- Me doy un aplauso mental. Buena niña, te sacaste esa excusa de la manga. Canto "we're the champions".
-¿No tienes nada, cierto?- pregunta Clara inquisitiva, con esa mirada acusadora que tanto me da miedo.
-No.-digo apenada.
-No te preocupes baby, fingiré que no me has dicho y ahorita consigues algo para que no te sientas tan mal. -Dice riendo.
Yo sólo suelto una carcajada y le recuerdo lo loca que esta.-Siento que Roberto me va a llenar de flores-Dice Clay aplaudiendo como una niña pequeña, mientras comemos helado de yogurt en iceyogh.
-Seguro sí, con lo guapa que estas no habrá quien se resista corazón.-Estoy muy entusiasmada. Por ella.
Ya saliendo de Iceyogh caminamos una cuadra para llegar a mi trabajo.
-Aaaaagggggh.-Clara voltea asustada, lo primero que hace es agarrar mi brazo fuertemente.
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Sin fronteras
RandomEl amor entre Audrey y Leonardo se ve en dificultades gracias a la distancia que los separa, juntos tendrán que luchar para que su amor "imposible" sobreviva a todas las adversidades.