Comprando tu Amor

Capítulo 15

Narra Alexa

Para este punto ya me sentía demasiado mareada, tan solo había tomado tres tragos, pero supongo que es porque soy principiante para esto del alcohol, le hice una pregunta a Derek y él solamente sonrió así que insistiré de nuevo, yo jamás le había contado a alguien la historia de cómo fue que termine siendo mamá de una niña de seis años.

- Cuéntame tu historia Derek - empiezo a reír como idiota, culpo al alcohol son sus efectos.

- Bueno Alexa, mi hermano mayor y yo éramos muy unidos, yo tenía una novia ella se llamaba Claudia, yo le propuse matrimonio, faltaba solo una semana para la boda, hasta que un día después de llegar de hacer ejercicio fuí a la habitación de mi hermano había dejado mis audífonos allí la noche anterior, cuando estaba cerca de la puerta escuché murmullos así que me acerque a la puerta cuando la ví a ella quitándose la ropa frente a mi hermano Cedrik, el solamente la rechazaba - ahora era él quien tomaba tragos de la botella.

- entonces que pasó - le quite la botella y tomé otro trago.

- Entonces entré, ella empezó a llorar y a decirme que no sabía que era lo que le había pasado que me amaba, aunque después empezó a decirme que ella se había enamorado de mi hermano y que no podía casarse conmigo, que ella pensaba en mi hermano mientras estaba conmigo en la cama, me devolvió el anillo, yo me cegué de enojo y coraje así que me aleje de Cedrik me volví distante con él, tenía celos yo estaba locamente enamorado de Claudia y ella solo tenía ojos para mí hermano - la amargura en su voz era notoria.

- Ella es una zorra, no estás con alguien y te anamoras de su hermano- le dije con cierto enojo en mi voz.

- tu sabes algo de relaciones de pareja Alexa, ni siquiera has tenido una pareja - decía burlándose de mí.

- estás diciendo que no puedo conseguir un novio - le dije algo molesta.

Esa no había sido mi prioridad

- no es eso, solamente dije que no tienes experiencia nada más - él piensa que no puedo conseguir a alguien porque no tengo experiencia.

Que tan difícil puede ser coquetear con alguien, creo que el alcohol te vuelve valiente también, porque jamás estando sobria haría lo que voy a hacer ahora.

Me levanté lentamente me paré frente a él, me incline un poco, el se recostó en el respaldo del sillón, me senté en sus piernas a horcajadas sobre él, pase mis manos por su cuello, el se acercó un poco a mi rostro y creo que estoy cayendo en la trampa de mí propio juego, el pasó sus manos a mi cintura y me acercó a él, yo ya no pensaba claramente acercó su rostro al mío.

- No tienes experiencia pero sabes que hacer para hacer que un hombre caiga rendido ante ti - yo sonreí victoriosa había logrado lo que quería.

Eso pensaba hasta que nuestros labios se unieron, ese tibio sabor a menta que ya había saboreado en ocasiones anteriores pero esta vez es porque yo quería hacerlo, creo que las ganas que tenía ahora de besarlo no las había tenido antes, no beberé más o terminaré haciendo algo indebido pero por ahora voy a disfrutar este beso.

Derek me aferraba a él mientras sus labios se movían muy bien sobre los míos, enrede mis dedos en su cabello, el calor dentro de mi estaba aumentando demasiado, una sensación de querer aferrarme a él me estaba dominando, algo que no había sentido antes, yo solamente quería más y más de él, sus manos empezaban a acariciar mi espalda de arriba hacia abajo.

Nos separamos por un momento y el sonrió, esa sonrisa no la había visto antes.

- ¿De que te ríes?- le cuestioné pegando mi frente con la de él.

- tu lado seductor, quién lo diría te ves tan dulce e inocente, pero cuando quieres usar tus encantos podrías volver locos a todos los hombres - yo me reí de eso.

- creo que es hora de dormir ¿no te parece?-

- si te quitas de encima tal vez podríamos ir a dormir, por mi te puedes quedar así a mi no me molesta tenerte encima de mí - el y su sonrisa arrogante me hicieron aterrizar, debía moverme.

Así que me levanté y Derek también, me mostró la habitación en la que yo dormiría, el se fue a la sala a dormir, al menos por ahora no tendríamos que dormir juntos, aunque asumo el hecho que luego de casarme con él tendré que dormir en su cama, al menos puedo estar tranquila él dijo que no se iba a propasar conmigo, pero ahora la pregunta es ¿Podremos dormir en una misma cama sin que pase nada entre el y yo?,  yo me quite la ropa y me recosté en la cama y ni siquiera sentí a qué hora me dormí.

Desperté por la mañana, cuando ví el reloj eran un poco más de las ocho de la mañana, no puede ser, es tardísimo para ir al trabajo, me levanté y me puse la ropa, salí de la habitación y cuando llegué a la sala allí estaba Derek durmiendo en el sillón, me acerque a él y lo sacudí un poco para que despertara.

- Vamos levántate es hora de despertar, vamos a llegar tarde al trabajo -  el sencillamente no quería despertar

- Alexa soy el jefe puedo faltar al trabajo cuando quiera - estaba molesto

- pero yo no, soy una empleada y esto irá a mi expediente, así que levántate y llévame al trabajo - lo sacudí hasta que se levantó del sillón.

Pero lo que hizo fue cargarme encima de su hombro y me llevo a la cama y me dejó allí.

- duérmete y déjame dormir, ¿sí?- empezó a salir de la habitación.

- espera nosotros......- sus labios sobre los míos ya no me dejaron hablar.

Ahora me quedé helada es la misma sensación extraña, lo de anoche fue por el alcohol, yo no soy así de atrevida, no sabía que podía hacer eso antes de probar el whiskey.

- si no me dejas dormir te seguiré besando hasta que se te duerman los labios, así que acuéstate y duerme, más tarde te llevaré a casa y te presentaré a mi padre y hermano, así que descansa -

Entonces regrese a la cama, me llevará a conocer a su familia ahora eso me preocupaba más que faltar al trabajo.