La loba de los vampiros (Twilight)

Garaje (Maratón 1/10)

Aclaración: Recibí muchos mensajes preguntando cuando subía la maraton o si había terminado. Me faltan un par de capítulos ya que quiero tener un mínimo de 10 caps listos. Por ahora subo uno de los capítulos que tengo listo para esta maratón ^_^

Desde el acuerdo que hice con los vampiros, todos estaban satisfechos y felices por que no los rechace como estaba haciendo hasta ahora, incluso mi lobo me dio un descanso de estarme gruñendo y atosigando la mayor parte del tiempo.

Pero, en algunos casos como Victoria y Kate.... no me esperaron tanto como hubiera querido, ya que sus insinuaciones y toques constantes que me ponían un poco nerviosa y en ocasiones terminaba besándolas con demasiada pasión. Cosa que provoco varias reacciones de mis demás improntas que todavía no había besado, desde sonrisas divertidas hasta irse la habitación para no presionarme. Que fue el caso de Rosalie, para mi sorpresa.

Me encontraba en el garaje de los Cullen, observando como Rosalie y Emmett arreglaban diversos autos.

—¿Son buenos arreglando motos? — pregunte desde la esquina donde me encontraba sentada

—Nunca lo hemos hecho, nos centramos más en autos— respondió Emmett sonriéndome

—Pero no nos molestaría, ¿Por qué preguntas? — acoto Rosalie mirándome y me di cuenta que tenia la mejilla manchada con un poco de aceite.

Lo pensé un segundo mientras me levantaba con un trapo en mi mano y me acerque a la rubia, que parpadeo y Emmett sonrió, cuando limpie el aceite de su rostro con el trapo.

—Todavía no ha llegado mi moto, pero cuando lo haga me gustaría que le echaran un ojo, si les interesa— comente mientras terminaba de limpiar suavemente la mancha de aceite de la mejilla de Rose.

—Claro, nos gustaría ¿Qué moto es? — pregunto Emmett, mientras Rosalie me miro intensamente con sus ojos dorados, lo que me puso un poco nerviosa y mire a los divertidos de Emmett que nos miraba.

—Una Yamaha Yzf- r3— conteste con nerviosismo debido a la mirada de Rosalie

—Son buenas— comento Emmett entre dientes, reconocí de inmediato que estaba intentando no reírse por la mirada intensa de su esposa hacia mí. 

—Si, creo que mejor me voy— dije lentamente, pero a penas di un paso hacia atrás, la mano de Rosalie estaba agarrando mi nuca y empujo mi rostro hacia el suyo, haciendo que nuestros labios se encontraran. 

Mi lobo aulló felizmente, me tomo unos segundos seguirle el beso, pero cuando lo hice, me sorprendió que Rose me levantara y me hiciera sentarme en el capo del auto que habían terminado de trabajar. Se posiciono entre mis piernas mientras sus manos estaban sosteniéndome con firmeza por la cintura, mis brazos rodearon su cuello haciendo un poco más de presión en el beso.

Tire su labio inferior con mis dientes y ella gruño, antes de meter su lengua en mi boca, gemí por eso y continuamos de esa manera un poco más hasta que tuve que separarme por falta de aire.

—Caliente— dijo Emmett

Nos dejamos de mirar a los ojos y giramos la cabeza para verlo, mirándonos con atención y con una sonrisa muy grande en su rostro. Luego me miro e hizo un puchero. Me reí entre dientes he hice un gesto para que se acercara. Él obedeció de inmediato y me incline besándolo suavemente.... ya no podía negar nada.

Su mano se apoyo en mi rodilla mientras nos besábamos, Rosalie ronroneo mientras nos observaba. Pero esta vez me detuve antes, Emmett hizo otro puchero. Lo que ocasionó que ponga los ojos en blanco juguetonamente.

—No es que no quiera besarte, no quiero perder el control que últimamente tengo sobre mi lobo— dije bajando del capo del auto.

—¿Eso sería un problema? — contesto Emmett con una sonrisa mostrando sus dientes blancos perfectos.

—Por ahora si— conteste sin dudarlo

Les guiñé un ojo y me fui de allí mientras me reía entre dientes por sus rostros sorprendidos por mis palabras.

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A pesar de normalmente los cambia forma deberían saber todo sobre sus enemigos "los fríos" según la leyenda que cuentan todo el tiempo, nunca en realidad preste atención a lo que decían. Por otra parte, dudo que los que siempre escuchaban o sabían la historia de memoria, incluso los mismos ancianos sepan de la existencia de los Vulturi.

Eleazar me conto sobre lo que para ellos seria lo más cercano a una realeza, si bien recuerdo que Edward había ido para morir con ellos, nunca me puse a pensar mucho sobre ello. Para mi sorpresa me pareció interesante y el hombre estaba contento de poder hablarme de ello, incluso Carlisle que había pertenecido por un tiempo a los Vulturis, me conto sobre ellos.

—¿Te vas a imprimir de ellos también? — pregunto burlonamente Victoria, sin darle importancia a la incomodidad del resto de vampiros presentes por esa pregunta.

—Espero que no, ya tengo suficiente con 14 improntas— murmure horrorizada, lo que gano algunas risas.

—¿Catorce? — pregunto Kate mirándome con una ceja levantada

—Edward, también es mi impronta, pero solo como amistad— conteste sin dudarlo

Vi como Jasper parecía confundido, nuestros ojos se encontraron y él me dedico una leve sonrisa y después negó con la cabeza para que no le diera importancia, asentí con la cabeza lentamente, pero no me convencía del todo.

Pero mis pensamientos se interrumpieron cuando vi a Irina con los brazos cruzados mirando hacia otro lado, con un divertido Laurent a su lado.

—Sigue enojada porque todavía no consiguió un beso tuyo — me aclaro Tanya divertida

—Y nosotras si— acoto Kate con una sonrisa

No voy a mentir, la actitud de Irina me estaba divirtiendo, pero habían pasado tres semanas desde lo ocurrido y recién ayer paso lo de Rosalie y Emmett que también estaban con sonrisas divertidas.

Puse los ojos en blanco, antes de levantarme y caminé hacia Irina. Sus ojos dorados me miraron mientras los entrecerraba. Sonreí mostrando mis dientes y tomé su mano y la de Laurent.

—¿Vamos a pasear? — pregunte mirándolos

—Seguro— respondió sin dudar Laurent

Pude notar sonrisas del resto de los vampiros por mis acciones, lo cual me puso nerviosa, sin darle más importancia salí con dos de mis improntas a pasear por el bosque cercano de la propiedad de los Cullen, pero saliendo de su rango de audición.