[3] "Problemas"

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14 de Diciembre del 2038
Alguna parte de la ciudad
15:35 pm
Hank

En alguna parte de la ciudad una ardua persecución entre la policía y un asesino en serie se daba, las calles estaban llenas de gente lo que dificultaba todo el trayecto, llego un momento donde los policías en las patrullas debieron iniciar una persecución a pie porque el asesino decidió dejar su auto y correr por callejones inhóspitos de la ciudad.

—¡Connor corre!—grito exagerado el teniente—¡Ese maldito hijo de puta!—gruño Hank.

—¡Alto policía de Detroit!—grito el androide con la cara manchada de sangre.

Connor empezó a correr tras el agresor que tenían en frente, el androide estaba furioso, habían atrapado al asesino en el acto, la persecución en auto había sido bastante estresante pero ahora estaba en un campo donde él era más rápido que ese malparido hijo de puta.

El día anterior estuvieron en su búsqueda, todo empezó con una supuesta llamada de broma a una de las operadoras del centro de policía, al principio sonó como un juego cuando reprodujeron la cinta pero todo fue de mal a peor al escuchar gritos del otro lado de la línea.

Al llegar al sitio donde se había generado la llamada encontraron un desastre, todo el lugar estaba revuelto, era una pequeña casa, revisaron todo de arriba abajo, no se habían llevado joyas, electrónicos o hasta al perro que tenía la familia.

Estuvieron al tanto todo el día buscando similitudes, grabaciones y nada, parecía como si la familia de hubiera esfumado.

La mañana del día siguiente tenían una pista, era en una bodega de la ciudad, donde se sabía que ocurrían ciertos delitos más allá de lo convencional.

Connor corría por toda la avenida principal detrás de un androide que había causado todo aquello, el de ojos avellana estaba furioso, sus circuitos estaban a punto de estallar.

El recordar como ese malnacido tenía sus sucias manos de metal en el cuello de una pequeña niña, le revolvió el estómago haciendo que le dieran nauseas.

El androide de ojos avellanas era rápido, esquivando los obstáculos como un corredor olímpico profesional, saltaba las vallas tal cual gacela en la sabana escapando de un león, pero esta vez él era el cazador, su presa estaba muy cerca, y podría perseguirlo por siempre si era necesario.

Hank observaba desde su auto como el androide corría por los techos de los edificios pasando por sobre jardines botánicos que estaban cerrados, ambos eran seguidos por un helicóptero para no perder de vista al agresor, al llegar a un punto de vista más alejado de todas las vistas posibles en un barrio peligroso de la ciudad, el agresor se escondió.

Connor lo estaba buscando por todos lados, preguntando a todo aquel con el que se cruzaba, llegó un punto en donde estaba tan frustrado por su búsqueda fallida que pasó algo por alto, el teniente no estaba cerca de él, lo cual podría ser peligroso para si mismo, volteo los ojos con fastidio.

Recordar los días anteriores habían sido también una forma de relajarse así mismo, se abrazó a si mismo tratando de emular el calor de su compañero.

El androide empezó a caminar sin rumbo, no quería dejar de buscar, sabía que era terco, pero su nivel de terquedad era otro cuento.

Llegó a una conclusión, el agresor no estaba por allí, debió de haberse movido para otro lado, escondido mejor, después de todo era un divergente como el.

Un ruido fue suficiente para alejar esas ideas de su mente, no supo cómo llegó, pero un fuerte golpe en sus sistemas hicieron que saltarán las alarmas, el agresor estaba detrás de él.

Un nuevo comienzo (Hank x Connor) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora