NO TE NECESITO...

Inquebrantable.

Este capítulo es de contenido sexual, así que si no te gusta leer a Misaki haciendo cosas deliciosas con otro que no sea Akihiko, entonces este es el momento de huir de la lectura.
Por el contrario, si te agrada, espero que te gusten estas líneas escritas desde lo más cochino de mi corazoncito.
Y de antemano muchas gracias a quien me lee y deja una 🌟.

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~Kyo... calma mi dolor. Quiero ser tuyo~

Ijuuin abrió los ojos enorme al escuchar esas palabras de su omega y sin dejar de jadear agarró ambas muñecas de Misaki para llevarlas por arriba de su cabeza y sujetarlo con una sola mano. Acortó la distancia entre ellos quedando a milímetros de la boca del castaño y acarició su mejilla.

<Pídelo de nuevo, Misaki>

—Quiero ser tuyo.

<Lo serás>

Los ojos de Ijuuin se tornaron más oscuros y en cuestión de segundos juntó su boca con la de Misaki para besarlo con lujuria y pasión.
Su omega correspondió al contacto con un beso igual de profundo y hambriento.
No podía creer que después de tanto tiempo por fin Misaki le dijera que lo amaba y pidiera hacerle el amor. Esto fue suficiente para que perdiera el poco raciocinio que tenía y aprisionó al castaño contra la pared mientras sus cuerpos se frotaban sintiendo un calor inmenso.
Su lengua exploraba con desespero la boca de Misaki y con la mano libre fue acariciando por encima de la ropa a su omega quien se estremecía y jadeaba sin control alguno.

Kyo soltó a Misaki de las muñecas y lo agarró de la nuca para introducir por completo su lengua, no pudo evitar el pensamiento de tener su duro falo abriéndose paso por esa boquita tan apetitosa con embestidas furiosas y mordió los labios de Misaki por tanto deseo acumulado en su cuerpo.
Nunca había sentido un extasis tan grande por un hombre, una sola mirada bastó para perderse en esos ojos verdes y quedar cautivado por completo. Su aroma lo había enloquecido desde la primera vez que lo olió.

El omega sentía esa frenética boca queriendo devorarlo y ¿podría tener un orgasmo con solo un beso? No lo sabía pero lo que sí era claro es que estaba muy caliente y mojado.
Kyo cargó a Misaki para que enrollara las por su cadera. Ijuuin no dudó en restregarle su miembro y se aseguró que quedara justo entre las nalgas del castaño para que percibiera lo duro que estaba.

<Eres precioso Misaki>

Lo sujetó firme de los glúteos y sin dejar de besarlo abandonaron el sanitario para dirigirse de nuevo a la habitación.
Kyo notó los temblores de Misaki y como su rostro ya estaba muy rojo. Era obvio que él omega entró en celo de nuevo y que los medicamentos para controlarlo fueron obsoletos. Era inútil contener lo que el cuerpo de ambos pedía a gritos, Ijuuin yacía igual o más excitado que Misaki y solo pensaba en aliviar el deseo que les abrumaba y venirse muchas veces dentro o fuera de su omega.

Llegaron a la cama y Kyo lo recostó viendo como Misaki respiraba con dificultad, con su boca entreabierta y los rastros de saliva escurrían por su mentón.

—Calmaré tu dolor Misaki—aseguró Kyo y comenzó a quitar el suéter que le impedía admirar el torso de su omega.

El color de la piel de Misaki era muy lindo, así como lo había imaginado tantas veces, sus manos se posaron por esa piel perfecta para acariciarla y después besar a su antojo.
Unas gotas del cabello de Ijuuin cayeron por el pecho de Takahashi quien se estremeció y gimió quedito cuando Kyo fue a su cuello para morderlo, justo donde el aroma a rosas era más intenso.
—Hueles delicioso—mordió su clavícula—tu aroma me enloquece.
—Ahh.. mmm
La lengua del alfa viajó desde su oído hasta los hombros y con su mano derecha acariciaba un pezon y después tiró de el causando otro gemido de Misaki quien se cubrió la boca.
—No hagas eso.—Ijuuin quito la mano de Takahashi y la colocó a lado de su cabeza para volver con los besos y lamidas por todo su pecho y estomago.