Cicatrices

331 39 23
                                    

Takahiro caminaba por la bahía de Tokio con lágrimas en sus ojos y el cuello adolorido. Sin duda Kyo Ijuuin tenía una fuerza impresionante y por mucho que estuvieran casi a la altura, él nunca podría derribar a un alfa.
Sintió como el agua mojaba sus pies y miró el cielo estrellado.
—Si..si Usagi san estuviera aquí de seguro me hubiese defendido de Ijuuin Sensei.
Un sollozo escapó de su boca y se abrazó así mismo intentando borrar los recuerdos de ese horrible día de hace más de 10 años.
—Perdóname Usagi san.. yo.. yo no quería abandonarte pero si no lo hacía, Misaki...

Takahiro ya no pudo hablar por el horrible nudo que le cerró la garganta. Tocó la marca que el alfa había dejado y lloró como nunca en su vida. Las palabras no salían de su boca pero sí de su ser interno.
~Como quisiera qué estuvieras aquí conmigo
Akihiko, yo te amo. Esperábamos un....

El Takahashi mayor se dejó caer por la arena después de usar su adolorida voz mientras la luz de la luna llena daba casi directo por su rostro. Takahiro se tensó al percibir a otra persona muy cerca y miraba hacia todos lados sobre la playa. En un acto por darle a entender su desagrado liberó su aroma y miró hacia uno de los hoteles.
~Esto no puede estar pasando de nuevo~


Misaki despertó al cabo de unas horas, miró su parte baja desnuda y se puso de mil colores al recordar como se masturbo pensando en Ijuuin. Se cubrió con la pijama y se paró de la cama, durante este tiempo perdió noción de todo, hasta de su pobre conejo que dormía hecho bolita en su jaula, lo miró unos segundos y ese extraño sueño donde hablaba con un hombre llamado Usagi san le llegó de forma instantánea.

—¿Quien es ese Usagi? ¿es algún pariente tuyo Kiwi chan?
Misaki rió un poco, tapó a su mascota y fue a la habitación de Takahiro encontrándola vacía.
—¿Qué acaso mi hermano no piensa regresar?

Recordó que Kyo escribió que podrían comunicarse por el correo y subió de nuevo a su habitación, sería más fácil usar el teléfono de su casa pero descubrió que Takahiro había cancelado el servicio hace una semana.

—Mi hermano se comporta como un verdadero demente.—Masculló con notoria molestia y agarro su portátil para escribir un correo.

Ijuuin despertó después de oír su teléfono sonar una y otra vez. Sus ojos se abrieron enorme al ver un correo de Misaki y no pudo sentirse más que feliz. Ese niño era capaz de alterar todos sus sentidos con actos tan simples como esos.
Descubrió que estaba casi desnudo y recordó la forma en que Takahashi le hacía el amor en su imaginación. Ijuuin podría ponerse erecto de nuevo con esas imágenes y decidió que era mejor alejar ese tipo de pensamientos.
Abrió el mensaje de Misaki y lo leía algo extrañado.

<Mi hermano no ha regresado a casa, ¿Que fue lo que le hiciste?>

El mangaka respondió al instante

<Solo lo que tú viste antes de que te desmayaras y te juro que le pedí disculpas. No le dije nada mientras estuvimos en el departamento de policía. Pero se puso muy alterado cuando vio que no te forcé a mis besos y caricias.
Comenzó a decir que te haría daño y que me alejara de ti antes de que te agrediera como a  él>

< ¿Me vio? ¿En donde?>

< En el video de las cámaras de seguridad del estacionamiento. Y quiero que te quede muy claro Misaki: Yo no te haría daño, me he enamorado de ti y seria incapaz de lastimarte TE NECESITO MISAKI Y QUIERO QUE ME AMES DE LA MISMA FORMA QUE YO LO ESTOY HACIENDO>

Ijuuin dejó escapar un suspiro al confesarse de manera escrita al chico, espero unos minutos por la respuesta de Misaki pero jamás llegó.

NO TE NECESITO...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora