Capítulo XVIII.

582 16 4
                                    

Bueno aquí me encuentro en mi habitación viendo el horrendo vestido que Angelo, me trajo por órdenes de Bruno.

Jamás creí que Marchetti, tuviera pésimo gusto en la moda, literal, me envió un vestido de color naranja encendido con tul amarillo por todos lados y en el cuello tiene un listón azul, que parce collar de perro.

Un rotundo "NO" para este vestido; camino hasta mi armario y saco un vestido rosa palo, el cual fue un regalo de Alek.

Aplicó bastante maquillaje para pasar un poco desapercibida y dejo mi cabello suelto en ondas, aplico un poco de perfume y me coloco mis accesorios junto con unos pendientes y unas zapatillas sencillas.

El timbre de mi departamento comienza a sonar y me doy cuenta que ya llegó el momento; baja a la planta de abajo, con el vestido que me regaló en las manos, y abro la puerta.

Bruno entra al living y su colonia inunda mis fosas nasales, viste un traje azul marino a la medida, incluso se pueden percibir sus trabajados músculos.

  - Te ves exquisita Masha.- habla con una sonrisa.- Pero ese no fue el vestido que te envié.

Lo miro con ironía y tiro al piso el vestido que me envió.

  - Ahí está tu vestido Bruno.- digo señalando la tela en el piso.- No pienso ponerme eso, en horrendo.- hago una mueca.

  - Pero por supuesto que está horrendo.- dice cabreado.- Yo no mandé esa cortina, esto debe ser un error, pero no te preocupes lo solucionare Masha.

  - Ya olvídalo, opte por algo mejor.

El asiente y me ofrece su brazo.

Tomo su brazo y en otra mano, llevo mi bolsa.

(***)

Nos encontramos dentro de un amplio salón, que se encuentra a las afueras de la ciudad.

Me quedo contemplando un rato el salón, hasta que siento un brazo en mi cintura.

  - No te separes en ningún momento de mi.- susurra Bruno, en mi oído.

Yo asiento y camino al lado de el.

Gran cantidad de personas se encuentran aquí dentro, aunque son más mafiosos con sus acompañantes.

Nos dirigimos a una mesa, en dónde se encuentran un hombre sentado.

  - Marchetti.- dice el hombre joven, de cabellos negros y un asentó ruso.

  - Dimitri.- saluda Bruno.- Ella es Masha, mi acompañante.- dice presentándome.

Le muestro una sonrisa y extiendo mi mano para poder estrecharla con el, pero Dimitri la toma y deja un beso sobre ella.

  - Un gusto señorita.- sonríe.- Soy Dimitri Ivanov.

Oh por dios, este es Dimitri Ivanov es quien se encarga de vender las armas a Innn, francamente nunca lo había conocido en persona, tan solo eh escuchado hablar de el.

Bruno carraspea sacándome de mi trance, y me indica que me siente junto a el.

La cena comenzó y los meseros comenzaron a servir una especie de plato viscoso.

Hice una mueca al ver tal platillo y Bruno, río.

  - No comeré esto.- digo, haciendo el plato a un lado.- Es completamente asqueroso.

Bruno toma una cucharada de su plato y la lleva directo a su boca, saboreando esa asquerosa comida.

Dimitri por su parte, casi está a punto de acabar, a lo que me causa gracia, su rostro todo sucio de comida.

  - Debes de comer algo Masha, te hará mal.- responde Bruno con sutileza.

Niego la cabeza y cruzo los brazos.

<<Qué madura, pienso en mi subconsciente>>

  - No, gracias.

El me mira y suelta una risa.

Un hombre alto, canoso, se acerca a nosotros con una sonrisa.

  - Buenas noches señores.- dice llamando la atención.- Señorita.- sonríe y yo le devuelvo el gesto.
**********
Aquí un poco de lo que escribí!!

Aún falta más en este capítulo!!

El rey de la mafia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora