Capítulo VIII.

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*Al día siguiente.*

- ¿Qué pudo averiguar Atenea?.- cuestiona la pelirroja a sus empleados.

- No, mucho.- habla uno de ellos.- Al parecer lo que andas buscando es que te maten.

- No, creó que el pueda con nosotros.- inquiere con aires de superioridad.

- También me pidió no acercarnos por el momento.- inquiere Svetlana.- Tal parce que De Santis le a puesto guardaespaldas, el cree que podemos lastimarla para llegar a él.

- Bueno eso, sería una muy buena idea.-habla Milenka.- Pero tenemos otras alternativas.

- No se te ocurra en tocarle ni un pelo.- contraataca Mikhail molesto.- No puedo creer que pongas a Atenea en ésto, y sobre todo arriesgues su vida; si algo le pasa, mejor cuidate de mi Milenka, te juro que olvidaré que eres hasta de mi propia sangre.

La pelirroja suelta una carcajada.- ¿Me estás amenazando hermanito?.- lo señala.

- Tómalo como quieras, estás advertida.- dice saliendo del despacho.

- Necesitamos tener vigilada a Atenea.- dice la pelirroja a los presentes.

- ¿Estás desconfiando de ella?.- cuestiona Svetlana, con algo de molestia.

- Claro que no.- responde rápidamente.- Pero no podemos confiarnos, ella está al margen de De Santis.

*Los Gobernantes*

- El jefe ha estado distraído últimamente.- inquiere Guido.- Eso no es bueno para la mafia.

- Es por culpa de esa chica.- inquiere Ryan molesto.- Creó se llama Olivia... Se la vive ahora al pendiente de ella.

- Creó que ya era hora que encontrara alguien que valga la pena.- contesta Dario.- El tiene derecho de tener una vida amorosa y forma una familia tal vez.

Guido suspira con algo de molestia.

- Al parecer también te embobo la oxigenada.- inquiere el rizado enojado.

Atenea POV.

Me encuentro con Adriana en una restaurante en el centro de la ciudad, siendo sincera por primera vez en mi vida me siento yo y no la mafiosa rusa.

Hemos ordenado algo de comida y un vino, mientras esperamos trato de romper el silencio entre los dos.

- ¿Vienes seguido aquí?.- cuestionó.

- No.- sonríe.- Un mafioso siempre está expuesto.

- Tienes un buen punto.- inquiero.

- Sabes, me gustaría saber un poco más de ti.- habla.

<<Tranquila Atenea, responde con sutileza>>.- pienso.

- Realmente mi vida no es muy interesante.- suspiro.- Trabajo como secretaria en una compañía, y de vez en cuando en el club como bailarina.- respondo con las palabras antes dichas por Svetlana.

<<Tal vez mi vida hubiera sido mejor si tan solo por una vez en mi vida hubiera escuchado los consejos de mamá, no me puedo quejar de lo que tengo y soy, pero algunas veces estar en esta situación no es la mejor, siempre estamos en riego y entre la vida y la muerte.>>

Adriano se acerca a mi y levanta mi mentón para que pueda verlo a los ojos

- Vaya que interesante preciosa.- sonríe.

Siento como mía mejillas arden un poco.

<<Estoy sonrojada.>>-pienso.

Por otra parte...

- ¿Es Olivia?.- cuestiona Luka, a mi lado.

Volteó y puedo visualizar a Estéfano tomando del mentón a Olivia.

- ¡Maldición, la está tocando!.- exclama Luka molesto.- Hay que entrar, ahora.

Cargamos nuestras armas y nos dirigimos al restaurante, entramos y puedo ver qué Estéfano no a traído guardaespaldas.

<<Perfecto>>.- pienso.

Olivia POV.

- Gracias Estéfano.- respondo con una pequeña sonrisa.

Se escucha una sonora carcajada algo conocida para mí.

<<Lukas Kovalev>>

- Señor, Georgiou.- habla con cierta burla en su voz.- No pensaba encontrarlo aquí.- inquiere con una sonrisa.

Estéfano, rápidamente se levanta de su asiento y saca su arma apuntando a Luka en su cien, me levanto de mi asiento y me posiciono detrás de el; tratando de ocultar las ganas que me dan de que le dispare a Luka por metiche.

- No cometas una estúpides.- dice Inna a nuestras espaldas.- Si, no ella se muere.- me apunta en la nuca.

<< Pero que diablos, este no era el plan>>.- pienso.

Las personas comienzan a salir alarmadas del restaurante.

Estéfano baja su arma y se gira quedado de frente a Inna.

- Así que tú eres la famosa Inna.- habla el pelinegro, con un ligero humor en su voz.

- La misma y a todo color. - responde ella con una sonrisa.

El rey de la mafia.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora