El mago extranjero

CAPITULO 1

¿Alguna vez te has sentido inútil? ¿Cómo si no fueras bueno en nada? ¿Simplemente promedio?, ¿pues que me dirías si te dijera que no es tu culpa? ¿Qué simplemente naciste en un universo en el que no puedes aprovechar tus verdaderos talentos? Personalmente eso jamás paso por mi cabeza. Yo era una de esas personas que jamás destacaban en nada, que era bueno en muchas a un nivel "aceptable", una persona que veía como los demás destacaban en algún deporte o materia mientras que yo no.

Sin embargo un día que no parecía ser diferente a los demás, mi vida cambiaria de una manera inimaginable. Estaba de pie mirando por la ventana sin nada que hacer en el que probablemente fue el día mas aburrido de mi vida. De repente estornude y al abrir los ojos ya no me encontraba en mi casa sino en un espacia blanco que parecía extenderse infinitamente, delante de mi habían dos sillones y una mesa de café con algunos bocadillos y una taza de lo que parecía ser te.

-¿Estas cómodo?- se escucho una voz muy profunda seguida de una puerta cerrándose. Voltee y vi a una... ¿momia? con un traje muy elegante y unas gafas de sol caminado hasta el sillón frente a mi hasta sentarse -¿Te gustaría algo de beber o un bocadillo?- pregunto cortésmente señalando una taza de té y uno aperitivos que definitivamente no estaban allí antes.

-Claro, muchas gracias- tome la taza de té y bebí un poco -Es es un sueño muy raro, es como esa escena de Matrix donde Morfeo le ofrece a Neo saber la verdad sobre el mundo, solo que en vez de Morfeo yo estoy con el hombre invisible- reí un poco ante la escena que tenía en frente.

-Este no es un sueño joven, en estos momento estas en mis dominios o mas específicamente en mi dimensión personal- Dijo cruzando sus piernas.

-De acuerdo, ok, voy a creerte entonces- dije con una mirada seria. Me sentía extraño por creerle y al parecer no fui el único.

-¿De verdad vas a creerme así de fácil?- pregunto con un tono curioso -¿Por qué?- el me miro esperando mi respuesta.

-No lo sé, tal vez porque quiero creer que algo interesante está pasando en mi aburrida vida, tal vez porque me gusta la sensación de alguien lo suficientemente poderoso e importante como para tener su propia dimensión quiere hablar conmigo específicamente- respondí con un encogimiento de hombros

-Mmm, entiendo- dijo él en voz baja – Tienes una mente abierta, eso hará lo siguiente mucho más fácil- dijo entrelazando sus dedos.

-¿Por qué? ¿Qué va a pasar ahora?- pregunto con curiosidad dejando la taza de te en la mesa.

-Vengo a proponerte la oportunidad de tener una vida interesante, una vida donde podrás vivir grandes aventuras ¿No es eso lo que has estado deseando todos los días desde que tenias hace años?- pregunto calmadamente ¿Mirándome fijamente? no sabría decirlo con las gafas y su cara completamente vendada -Pero antes de que siquiera consideres mi oferta supongo que deberé demostrar que tu fe en mi no es infundada- aplaudió dos veces y la habitación entera comenzó a llenarse de pantallas que lo mostraban todo, literal lo mostraban todo.

Me levante lentamente y observe todas las pantallas detenidamente. En ellas logre ver de todo, desde lo que hacían un centenar de personas en todas partes del mundo, lugares que jamás había visto, lo que hacían mis conocidos en este momento e incluso a mi mismo viendo esta pantalla , todas mis dudas habían desaparecido sin dejar rastro.

-¡Esto es asombroso! ¡Es como si fuera magia!- exclame sorprendido mientras el soltaba una risa debido a, lo que luego comprendería, eran las palabras que había elegido.

-Me alegra que disfrutes de este pequeño espectáculo- dijo en un tono jovial, incluso dio un pequeño aplauso -Supongo que es suficiente, dejame presentarme. Mi nombre es Exis y soy el dios del Multiverso Prime- dio una reverencia, la cual devolví en señal de respeto, para luego regresar al sillón.