《 Ła Đama Čon Ûn Mazo Đe Čangrejo 》

51 El Despertar del Supremo Mago del Fuego

Cuando Kiho llegó a la cima más alta del bosque, finalmente pudo ver más de cerca al majestuoso pájaro en llamas. Pero su frente se hizo un nudo en confusión cuando se dio cuenta de que el Fénix Rojo no se estaba moviendo.

[¿Alguien le disparó con una bala paralizante?]

Odiaba tener que atacar al pájaro rojo cuando no podía defenderse. Se sentía peor al saber que se iba a aprovechar de la obra de otras personas. Pero quería ganar la Caza. Honestamente hablando, estaba acostumbrado a las tácticas sucias debido a sus misiones de asesinato. Pero cazar una bestia legendaria como esta era un golpe en su orgullo.

Sacudió la cabeza para deshacerse de esos pensamientos.

[Ojos en el premio, Kiho.]

Se puso de rodillas y preparó su rifle para golpear al Fénix Rojo en ambos ojos.

Según Duke Prescott, el Fénix Rojo, aunque sea una réplica, buscaría algo importante para él. Por tanto, se "despertaría" agitado. 

Para detener temporalmente su movimiento, tuvo que cegar literalmente al pájaro rojo. Una vez que pierde la vista, deja de volar y descansa sobre cualquier cosa lo suficientemente alta como para su agrado. Un árbol gigante o la azotea del castillo, por ejemplo. 

Pero dado que el Fénix Rojo tuvo una rápida regeneración, tuvo que capturar al pájaro en llamas mientras aún estaba ciego. 

[No puedo fallar.] 

Cuando Kiho estuvo seguro de que daría en el blanco, finalmente apretó el gatillo. Pero antes de que la bala pudiera llegar al Fénix Rojo, el majestuoso pájaro desapareció repentinamente en el aire.

[¡¿Qué?!]

Estaba aún más sorprendido de ver al Capitán Sherwood flotando en el aire. Cortó las balas que casi lo alcanzan. Ah, el capitán de Blue Dragon Knights probablemente también estaba tratando de atrapar al fénix desde el otro lado.

"Oye, cuidado", se quejó el capitán Sherwood cuando lo vio. 

"Casi me disparas, Capitán Kiho." 

"Lo siento", dijo Kiho casualmente. 

"No esperaba que el Fénix Rojo desapareciera de repente, Capitán Sherwood." 

¿Dónde desapareció el majestuoso pájaro llameante?

 *** 

Tilly no sabía si estaba alucinando o algo así.

Pero en este momento, estaba mirando un hermoso pájaro rojo llameante en el cielo. Sus orbes dorados la miraban fijamente como si finalmente encontrara lo que estaba buscando. Podía leerlo en sus fascinantes ojos.

"Ven", susurró Tilly, aliviada de escuchar y sentir el latido de su corazón nuevamente. Cuando su cuerpo finalmente se sintió ligero, abrió los brazos al pájaro rojo. "Ven a mi."

El Fénix Rojo pareció entenderla porque de repente comenzó a descender hacia ella a una velocidad alarmante. Pero a pesar de que el pájaro gigante estaba envuelto en llamas rojas, ella no se asustó. Podía sentir que no le haría daño.

Cuando el Fénix Rojo estuvo a unos metros de ella, su cuerpo comenzó a flotar hasta quedar de pie en el aire. Envolvió sus brazos alrededor del pájaro rojo mientras la encerraba en sus suaves y cálidas alas.

La daga en su pecho se quemó hasta convertirse en cenizas, pero su cuerpo y su ropa estaban bien.

"¿Puedes sentir mi ira, Fénix Rojo?" Tilly preguntó al pájaro rojo mientras acariciaba sus suaves plumas. Movió la cabeza como si asentiera en respuesta a su pregunta. Como esperaba, el fénix podía entenderla.